"Escribir sale del alma, los otros medios son aparatos, son máquinas"

"Escribir sale del alma, los otros medios son aparatos, son máquinas"

Gabriel García Márquez

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lunes, 29 de septiembre de 2008

Me niego a votar en 2009 / Columna

De medios y otros demonios

Me niego a votar en 2009

J. Israel Martínez Macedo

En el transcurso de las últimas semanas hemos sido testigos en el Estado de México de la preparación de una gran obra que no tiene símil en el país desde que se había logrado la ciudadanización de los órganos electorales en México, es lo que podríamos llamar, con el perdón de García Márquez: la crónica de un descrédito anunciado.
Y ha sido así: con la lectura diaria y cotidiana de los anuncios hechos por la Legislatura local, por la decisión de desintegrar -aún sin justificación lógica, clara y contundente- un Consejo que entró de relevo y que salvó una elección que, se temía, sería un total y rotundo fracaso.
Lejos del periodo electoral fueron cuestionados sobre su permanencia en el organismo, a pesar de eso lograron reducir costos y reinvirtieron ese dinero en la profesionalización de un Instituto que se transforma una vez más, aunque ahora en sucursal de los partidos políticos -el que usted quiera tricolor, blanquiazul, aurinegro, naranja, verde, morado o el color que sea; da igual-.
No es más, y por tiempo indefinido, un órgano ciudadano.
Hoy más que nunca para poder participar en la política, aún en cuestiones electorales, debe el aspirante pertenecer a un coto de poder, jugar su juego y acostumbrarse a él para perpetuarlo hasta el cansancio.
Curiosamente previo a la elección anterior ocurrió lo mismo: consejeros “ciudadanos” -entrecomillo porque hoy se encuentran amparados bajo las ínfulas de algún poder o partido- hicieron (porque lo ejecutaron después de todo) del Instituto Electoral un negocio. Fueron detectados y eso les costó el puesto a ellos y a sus compañeros, que si bien no participaron en la turbia negociación con Cartonera Plástica, tampoco actuaron decididamente para sancionarla. En la omisión llevaron la penitencia.
Nuevamente previo a una elección se enturbia el ambiente de la manera más burda y soez -lo que no puede ser entendido de otra forma que un insulto a la inteligencia de cualquier votante-, se enloda un proceso que aún no arranca, los partidos ocupan el lugar de los ciudadanos y hacen evidentes sus negociaciones por debajo de la mesa.
Ninguno respinga, nadie se queja, sólo se amedrentan unos a otros para ver qué pueden obtener para sí. Los partidos orquestan el golpe y los restantes guardan el silencio de la complicidad, de la colusión, de la conformidad.
Y en el hastío del engaño, de la farsa, de la impostura… del cinismo; es ahí donde no queda más remedio que tomar la única opción ciudadana que dejan como rescoldo de un derecho usurpado y mancillado: Me niego a votar por ellos.
Me resisto a ser parte de un juego político del que sólo interesamos como legitimadores de sus “amarres” -carne de cañón, pues-. El domingo 5 de julio de 2009 me apersonaré en la casilla que me corresponde, tomaré mis papeletas, las cancelaré con dos rayas paralelas de arriba abajo como muestra de mi desaprobación a todos por igual, doblaré las hojas, las introduciré en la urna correspondiente y dejaré que me entinten el dedo y marquen mi credencial de elector. No permitiré que me roben, también, mi derecho a votar.

israel.martinez@milenio.com

domingo, 28 de septiembre de 2008

¿Tiene usted las manos manchadas de sangre? / Columna

De medios y otros demonios

¿Tiene usted las manos manchadas de sangre?

J. Israel Martínez Macedo

Si usted se encuentra escuchando un buen disco de música adquirido por sólo 10 pesos (pobres idiotas los que pagan hasta 200, já) pido un minuto de su atención para comentarle que una nota pasó prácticamente desapercibida en esta semana, en parte porque no ocurrió en nuestra entidad y en parte porque entre atentados y decapitación ¿qué son unos cuantos Zetas detenidos en Michoacán?, hoy en día podría pensarse que nada, pero no es así.
Resulta que la escueta información que llegó hasta estas tierras señalaba que los detenidos, además del consabido arsenal de alto calibre con el que acostumbran pasearse estos angelitos, traían entre otras cosas una lista de distribuidores de piratería a quienes iban a cobrar algunas deudas pendientes.
Eso comprobaría lo que ya se había enunciado y pocos, muy pocos, quisieron escuchar: la piratería es otro negocio de la delincuencia organizada en su diversificación de “mercado”.
Sí, sé que es más barato, que con lo que cuesta ir al cine acompañado de una sola persona podría comer una familia por un día; que tienen casi la misma calidad que las originales, que éstas son cada vez más caras -sobre todo si se trata de ediciones especiales-, y cualquier pretexto de esos que se acostumbran decir para comprar piratería.
Entiendo que las empresas venden más caro en México cualquier producto en ausencia de una autoridad económica que exija explicación a estos elevados costos. Pero no puedo dejar de pensar que cada peso que se gasta en piratería es un peso que entra directo al financiamiento de la lucha contra la seguridad, el Ejército mexicano, las instituciones y la paz en el país.
Y si piensa que es una afirmación exagerada, aquí unas cifras que ayudarán a pensarlo un poco: en el año 2000 se estimaba que la piratería en México representaba un negocio ilegal por más de 180 mil millones de dólares, el negocio se multiplicó y actualmente se estima que para 2008 ascienda a medio billón de dólares.
¿Cuántas granadas, como la que estalló en Morelia, piensa usted que se pueden comprar con esa cantidad? ¿Cuántos sicarios creé que pueden pagarse en México durante un año con 500 mil millones de dólares?
Siendo sinceros, mucha gente tiene responsabilidad en este asunto. Las mismas empresas que se agrupan en diversa asociaciones para la defensa de la propiedad intelectual elevan los costos de forma desmedida en los artículos originales, un disco compacto original de un grupo como Metallica cuesta en EU alrededor de 13 dólares, en México el precio por el mismo producto llega a costar hasta el doble.
En segundo lugar las autoridades. ¿Cuántos policías no ha visto usted, ya no digamos estacionados junto a un puesto, comprando uno o varios discos de música o video piratas? Yo a varios uniformados, que además, con todo el descaro piden un precio especial por no “levantar” el changarro.
Pero también, en gran medida, los compradores: personas que para no pagar el elevado costo de un producto original, que ante la complacencia de las autoridades, prefieren los productos mucho más baratos de la piratería sin saber que con ello está financiando el negocio de la delincuencia organizada.
En el colmo del cinismo, las plazas comerciales ya rentan espacios a vendedores de piratería que indiscriminadamente ofrecen sus productos abiertamente, incluyendo catálogos de lo más reciente y hasta material que “aún no llega a México”.
Escuche un disco compacto pirata, vea una película en DVD clonado; pero no se queje si lo asaltan, le secuestran un familiar o es testigo o víctima de un atentado con granadas; después de todo usted financió con “donaciones” de 10, 20 o 30 pesos a los grupos de delincuencia organizada. Piense que con su dinero se ha matado a mucha gente inocente, entre ellos niños. Sí tiene usted las manos manchadas de sangre.
Ahora sí lo dejo, para que siga escuchando a gusto su música, o se disponga a poner en DVD el clon de su preferencia.

israel.martinez@milenio.com

lunes, 22 de septiembre de 2008

Semana para el olvido en Latinoamérica / Columna

De medios y otros demonios

Semana para el olvido en Latinoamérica

J. Israel Martínez Macedo

La situación de los medios en América Latina no es la mejor en este momento, en nuestro país, en Morelos, los edificios de distintos medios tuvieron que ser resguardados por cuando menos 600 elementos policiacos por temor a agresiones por parte de los maestros de la sección XIX del SNTE.
En Bolivia hubo un atentado en contra de Red Uno, en Cochabamba; aprovechando los enfrentamientos entre el Ejército y la oposición a Evo Morales, sin embargo la sospecha que corre en aquel país sudamericano es que se trata de una agresión gubernamental debido a que la televisora ha sido crítica del gobierno.
Los informes de los reporteros de aquel país indican que los grupos de de apoyo que se trasladan para vitorear a Evo o para vilipendiar a sus opositores detenidos, han terminado agrediendo, incluso a pedradas, a los trabajadores de los medios y destacan que esta actitud se incrementó desde que el presidente boliviano declaró al término de la sesión cumbre del Unasur que “95 por ciento de la prensa boliviana es opositora”.
En Venezuela, Hugo Chávez expulsó al representante de Human Rights Watch para las Américas, José Miguel Vivanco, luego de que éste diera a conocer un reporte titulado “Una década de Chávez. Intolerancia política y oportunidades perdidas para el progreso de los derechos humanos en Venezuela” y que evidentemente no le gustó al gobierno chavista.
En el resumen sobre medios de comunicación, los observadores de Human Rights Watch señalaron: “El gobierno de Chávez ha atentado contra la libertad de expresión a través de diversas medidas para cambiar el control y contenido de los medios de comunicación. En Venezuela aún existe un dinámico debate público, en el cual los medios opositores al gobierno y aquellos afines a él pueden hacer oír sus críticas y su apoyo a Chávez.
“Sin embargo, al expandir y endurecer las penas por delitos que castigan opiniones críticas y supuestas infracciones a las normas sobre regulación de los medios, Chávez y sus partidarios en la legislatura han fortalecido la capacidad del estado (sic) de limitar el ejercicio de la libertad de expresión, creando además poderosos incentivos para la autocensura. El gobierno también ha abusado del control estatal de las frecuencias de transmisión con el objeto de intimidar y discriminar a estaciones que emitían una programación claramente crítica”.
De regreso en México, el atentado en Morelia abrió el debate sobre la función social de los medios y la cobertura informativa de las acciones de la delincuencia organizada con dos posturas que se resumen en: libertad de acción e información arriesgando aún la vida, por un lado o autocensura a cambio de seguridad personal del reportero, por el otro.
¿Qué pasa en los medios de Latinoamérica? ¿Por qué se encuentran en esta situación? ¿Son -somos- víctimas o victimarios? Preguntas que requieren, esencialmente de un debate mayor, de una discusión amplia y de acciones que se reflejen en mejoras para la actividad periodística.

DESDE INTERNET
Los resultados de la encuesta de esta semana en http://jisraelmartinez.blogspot.com arrojaron que la mayoría de la gente siente temor ante la situación de violencia que se vive en el país, sin embargo destaca que una parte importante dice sentir de igual forma risa y coraje y en menor medida preocupación.
Para esta semana: ¿Crees que los gobiernos latinoamericanos buscan restringir el trabajo informativo de los medios? Sí, No, No sé. Además el foro InterActúa sigue abierto para cualquier opinión. En cuanto a televisión por internet, una propuesta brasileña.

israel.martinez@milenio.com

domingo, 21 de septiembre de 2008

Un iceberg llamado Tenería / Columna

De medios y otros demonios

Un iceberg llamado Tenería

J. Israel Martínez Macedo

En los días recientes se registró la exigencia de los estudiantes de la Normal de Tenería para acceder a una plaza como maestro en cualquier institución educativa del gobierno; libres de toda competencia, examen o alguna otra exigencia que signifique demostrar que tienen el conocimiento y la capacidad suficiente para estar ante un grupo de niños y además poder darles una buena educación.
Es entendible la molestia de los estudiantes: ingresaron a una institución que les garantizaba tener trabajo al terminar sus estudios y ahora resulta que siempre no, que tienen que entrarle a la competencia como cualquier otro egresado de cualquier otra institución. Sin embargo, eso no justifica la serie de barbaridades que han venido cometiendo para exigir cumplimiento a aquello que les habían ofrecido.
Pero el asunto desata un problema de fondo mucho mayor, lo que vimos con los estudiantes de Tenería es sólo la punta de un iceberg enorme que implica varios niveles del sector educativo.
Por una parte, licenciados en educación de diversas universidades como la Pedagógica Nacional o la propia UAEM compitieron por una plaza en la administración pública y obtuvieron mejores calificaciones que los egresados de las normales del Estado de México, con lo cual, teóricamente, serían acreedores a una plaza. Sin embargo, no fue así.
Resultó ser que una vez que se publicaron los resultados de los exámenes, quienes alcanzaron la calificación aprobatoria deben esperar ahora a que haya una plaza, es decir, el tradicional y no muy transparente: “deje sus papeles, nosotros nos comunicamos con usted”. Todo apunta a que el motivo es el mismo de siempre, los puestos fueron otorgados al hijo del primo de un amigo que trabaja en la Secretaría de Educación. Lástima, era una buena idea.
Pero no conforme con eso, el examen dejó en evidencia el bajo nivel académico-formativo de las normales del Estado de México, de ella están egresando profesores que no son capaces de controlar a un grupo de 20 o 30 niños, lo que de por sí no es sencillo, y además darles un conocimiento que, incluso, ellos mismos desconocen; por si fuera poco una buena parte de los profesores de primaria y secundaria está más preocupado por cumplir un programa calendarizado, llegar temprano y no salir tarde y esperar que al final del año ningún padre de familia se ponga pesado porque su niño no sabe nada.
Esa es la realidad de la educación en el sistema público estatal. Por supuesto que existen las honrosas excepciones, pero lamentablemente sólo son eso: excepciones.
En resumen: promesas falsas, extraños manejos con los resultados de las evaluaciones de ingreso al sector laboral, deficiente preparación de los futuros profesores en el sistema normalista mexiquense; explican por qué el malestar de quienes no ven una posibilidad real de acceder al espacio laboral.
Por supuesto que encontrarle explicación al malestar no justifica los actos de vandalismo en que los estudiantes de Tenería han incurrido en los últimos días, ni mucho menos que intenten presionar a las autoridades a través de secuestrar las vías públicas, golpeando y robando a los representantes de los medios y mostrando que son el modelo de maestro que nadie quiere para sus hijos.

DESDE INTERNET
En el ciberespacio http://jisraelmartinez.blogspot.com uno de los lectores nos deja el siguiente comentario: “Una imagen más, aunque en este caso es una noticia celebrada dentro y fuera de Uni Radio: la salida de su director”.
Es cierto, se dijo en el Se Comenta de esta casa editorial que José Luis Cardona dejaba sus labores en la Máxima Casa de Estudios de la entidad para pasar a formar parte de la estructura gubernamental estatal.
Hasta este momento no se tienen definido si se nombrará como director a alguien que ya trabaje en la estación o si se traerá alguna persona ajena a la misma para realizar la labor, lo que queda claro es que se trata de una oportunidad inmejorable para recuperar el público que la estación dejó ir en su nacimiento a través de una reestructuración programática que, siendo una radio pública, seguramente se daría algún tiempo después del nombramiento buscando “guardar las formas”.

israel.martinez@milenio.com

lunes, 15 de septiembre de 2008

Imágenes del estado / Columna

De medios y otros demonios

Imágenes del estado

J. Israel Martínez Macedo

Dos son los hechos que esta semana hicieron que el territorio mexiquense ocupara los titulares de los medios nacionales: los 24 ejecutados encontrados en La Marquesa y la renuncia del presidente del IEEM, José Núñez Castañeda.
En el primer caso la noticia recorrió, incluso, las fronteras y se posicionó en el imaginario como una sanguinolenta masacre, inexplicable para los ojos del mundo sin el contexto del avance de la delincuencia organizada y el narcotráfico.
La delincuencia igual pudo deshacerse de los cuerpos en cualquier paraje del territorio nacional, cualquiera. La pregunta entonces sería: ¿por qué en La Marquesa? ¿Qué tiene este lugar para ser considerado por la delincuencia organizada como cementerio de rivales?
Después de este hecho es posible confirmar las declaraciones de los distintos actores políticos: el país no está en guerra. Eso es evidente, el Estado apenas estará dando una ligera batalla.
Sin embargo, es de llamar la atención la rapidez de reacción: apenas el viernes se encontraron los cuerpos y la medianoche del sábado ya había “presuntos responsables”. Supongo que nada tiene que ver que el gobierno del Distrito Federal anunciara en la semana la detención de quienes han sido señalados como asesinos del hijo del empresario Alejandro Martí.
Los cuestionamientos radican en si la eficiencia tiene que ver con las ambiciones electorales de los funcionarios-políticos o en una verdadera tendencia policíaca a dar, por fin, la pelea y devolver la tranquilidad a los habitantes.
Si el asunto se ha resuelto por cuestiones políticas, queda evidencia entonces de que cuando se lo proponen las instituciones de seguridad y justicia funcionan, será entonces una prueba de que todo radica en lo que sea que signifique esa mítica frase sacada del Diccionario Mexicano de Demagogia: “voluntad política”.
Y si la duda es mayúscula sobre los motivos que hicieron mover el engranaje de la procuración de justicia en el centro del país, aquella sobre la renuncia de Núñez Castañeda al frente del IEEM no se queda atrás.
Aunque los politiqueros -porque los verdaderos políticos supieron guardar sana distancia al respecto- intentaron utilizar la salida del presidente del IEEM con cualquier clase y cantidad de argumentos absurdos -como aquel de que se iba porque perdía su coto de poder en el organismo-, la percepción es la misma: los partidos-poder no perdonan que una institución sea ciudadana y pueda adquirir más fuerza que la suya.
A todas luces el IEEM se partidiza más y se ciudadaniza menos cada minuto que se acerca la elección de 2009, la reforma electoral fue diseñada para que sean los partidos quienes tomen el control a través de la Cámara de Diputados.
La decisión de Núñez Castañeda ha sido aplaudida por algunos y vituperada por otros, lo que no puede negarse es que hace ver muy mal a los diputados de la LVI Legislatura que se notan más preocupados por servir a su partido que a su pueblo.

DESDE INTERNET
A petición popular -ese pretexto siempre aplica- regresa la encuesta en http://jisraelmartinez.blogspot.com, esta semana con la pregunta “¿Qué te genera la situación de violencia en el país?” y como opciones: “Miedo, Risa, Preocupación, Ira, Coraje, Decepción”. En cuanto a TV por internet se presenta la propuesta del canal japonés Yomiuri Daily News. Y para los fans de la foto, un rollover de National Geographic que muestra una imagen diferente cada día.

israel.martinez@milenio.com

martes, 9 de septiembre de 2008

“No me han dicho, pero lo huelo… nadie es indispensable” / Entrevista

Enrique Peña Nieto, gobernador del Estado de México

“No me han dicho, pero lo huelo… nadie es indispensable”

El mandatario aclara que las instituciones están por encima de las personas al referirse a las aspiraciones electorales de sus colaboradores. En su caso, decidirá hasta 2011, cuando concluya la gestión

J. Israel Martínez – Toluca

El gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto aseguró que el tiempo de pensar en aspiraciones políticas aún no ha llegado y se mantiene firme en la postura de no definir si buscará la Presidencia de la Republica, sino hasta 2011, cuando haya concluido su administración; aunque se define como “un militante más, un guerrero más que estaré ahí en la brega cuando mi partido me lo diga”.
En cuanto a la posibilidad de cambios en su gabinete por aspiraciones políticas de los funcionarios que lo integran, el mandatario estatal dice que aún ninguno se lo ha informado “pero lo huelo” y advierte que si su partido, el PRI, considera a alguno de los miembros de su equipo, él será el primero en consentirlo.
En el salón Adolfo López Mateos, a un costado de su oficina en Palacio de Gobierno, Enrique Peña Nieto recibió al equipo de MILENIO Estado de México, en un ambiente de cordialidad refrendó su postura al frente de la administración y advierte que en su gobierno “nadie es indispensable”.

Sin futurismo, como usted mismo lo ha dicho, pero los propios partidos políticos lo colocan ahí; la oposición lo está colocando en esa aspiración a pesar de que es una situación muy adelantada ¿Cuál es la opinión?
Es muy anticipado hablar de aspiraciones a futuro y en verdad lo es, porque tienes una responsabilidad, acometer otra o aspirar a acometer otra, no es ni momento y menos puedes definirla cuando no has concluido una responsabilidad y yo la tengo muy clara; además me siento muy orgulloso y honrado en las responsabilidad que tengo y deseo hacer muy bien las cosas en mi estado.
Lo que sí tengo claro es que tampoco puedo permanecer mudo ante este tema y en consecuencia también tengo muy claro que el momento para definir mi eventual aspiración, será hasta que concluya mi responsabilidad, porque los tiempos me lo permiten, si antes de esto fuera el 2012 antes de 2011, entonces sí tendría que tomar una definición; pero el tema es en el 12, y yo concluyo en el 11, me da tiempo de acabar bien con mi tarea y ahí sí estoy obligado a tener una definición, es más en el 11 tendré una definición y ahí te diré si tengo o no aspiraciones para 2012.

Viene 2009 ¿algunos de sus colaboradores ya le dijeron “voy a ir” o algo así?
No me han dicho, pero lo huelo...

¿Como cuántos cambios podría tener?
Creo que si el partido encuentra en los colaboradores de gobierno perfiles para proyectarlos a la contienda, seré el primero en consentir que así sea, yo sé que no se trata de desmantelar al gobierno, estoy muy orgulloso del equipo de trabajo que colabora en el gobierno; ahí están los resultados, nos falta todavía concretar y consolidar la obra de gobierno, vamos a la mitad del camino.
A fin de cuenta nadie es indispensable, las instituciones están por encima de las personas y si hay seriedad y conducción, podemos acometer el compromiso de cumplir a cabalidad con lo ofertado y si el partido ve, insisto, perfiles dentro del ámbito laboral del gobierno, bienvenido, seré el primero en aplaudirlo; es decir, que “por su frutos los conoceréis” y eso le dará al partido la oportunidad de decidir.

¿Serán los frutos de ellos o los de usted? Es el gobernador más popular.
Sí, pero es un trabajo de equipo.

Y de verdad, cuando va uno de gira, ve cómo las mujeres mueren por usted, lo quieren abrazar, besar…
Y de aquí pa’ allá también…

Ese es el punto, ¿es el PRI o es usted?
Yo me he definido como un militante más del partido cuando se trata de la contienda política, de la contienda de partidos, me asumo como un militante más, como un guerrero más que estaré ahí en la brega cuando mi partido me lo diga.

¿Pero percibe que va a tener una recuperación el PRI importante para 2009?
Las encuestas de hoy, que todavía no es la elección, proyectan a un PRI más fortalecido y más sólido con mejor posicionamiento en la preferencia del electorado: Pero las encuestas no votan ¡eh!

¿Un PRI más fortalecido o un Enrique Peña fortalecido?
No, un PRI, un PRI, yo también creo que hago mi contribución, tampoco “me tiro al piso”, me uno como militante y en esta responsabilidad. Siempre lo he dicho: la mejor forma que tienes de ayudar a tu partido es haciendo bien lo que te toca hacer y si a mi partido le ha servido y le sigue sirviendo que yo haga bien las cosas, creo que esa es mi responsabilidad como militante, hacer las cosas bien en el gobierno, porque es mi deber, con lo que ofrecí ante la ciudadanía, porque sí tienes un doble compromiso, el más importante: la confianza que recibiste de la gente, el mandato que recibiste de la sociedad; y dos, en el caso también de ser militante activo de tu partido, entonces primero cumplirle a la sociedad y al hacerlo en automático estás cumpliéndole a tu partido también.

Pero no se pueden negar las aspiraciones personales, aunque la obligación sea cumplir en ese sentido eso es lo que todos queremos saber: ¿cuáles son las aspiraciones personales, no como gobernador, sino las de Enrique Peña Nieto?
Personalmente, concluir mi gestión.

¿Y como militante del PRI?
Como militante deseo que a mi partido le vaya bien y mi responsabilidad está en hacer bien las cosas del estado, y mi aspiración personal como militante y gobernador, de verdad, es concluir bien mi gestión, llegar a 2011 satisfecho conmigo mismo, contento de saber que hemos hecho una aportación al desarrollo del estado.
Creo que una administración no será la que haga al Estado de México, son contribuciones las que tiene este gobierno en estos seis años, me interesa hacer una importante contribución, por modesta que sea, pero importante que realmente sea motor de cambio y transformación para el Estado de México, entonces hago mi modesta contribución como gobierno, porque el Estado de México es su historia y son las aportaciones que han hecho generaciones que han transitado en tareas de gobierno, en tareas sociales, y que hacen del Estado de México lo que hoy tenemos, y espero que la contribución haga del Estado de México todavía más grande, más fuerte, más sólido y mejor consolidado de lo que hoy tenemos, es a lo que aspiro, es mi aspiración y si después de eso hay otras inquietudes, pues serán después de que concluya. No las habrá, y por eso las marqué en mi discurso, no es tiempo y soy el primero en no distraerme en estos temas.

En una autoevaluación, ¿usted se considera un político con futuro?
¿En una autoevaluación?, Yo no puedo hacer evaluación de mí mismo, yo dejo que sea la sociedad que me evalúe y evalúe el trabajo del gobierno, no podría dar ni siquiera calificación alguna.

Ya la última y nos vamos ¿Llegará casado a 2011?
¿Llegaré casado?, Pues mira no llevo prisa en el amor, no llevo ninguna prisa.

¿No va a romper corazones?
No, mira lo que me permita seguir trabajando y dedicarle mi empeño a esta responsabilidad, pero nada más.

lunes, 8 de septiembre de 2008

El verdadero informe / Columna

De medios y otros demonios

El verdadero informe

J. Israel Martínez Macedo

En estos días de septiembre cuando los asuntos correspondientes a los informes -federal y estatal- acaparan los espacios informativos vale la pena revisar los temas que se trataron, mediáticamente hablando, y el enfoque que la llamada “opinión pública” le ha dado a estos eventos.
El primer punto que se mantuvo en discusión en prácticamente todos los medios fue el relacionado con los formatos con que se presentaron las respectivas rendiciones de cuentas al Congreso de la Unión y a la Cámara de Diputados local.
El jaloneo se ha dado en virtud de definir cuál es la mejor manera de entregar un informe de labores, que si debe hacerse sólo por escrito, que si debe hacerse presentarse el titular del Ejecutivo ante el pleno del Legislativo, que si debe darse mensaje después, que si debe hacerse uso de los tiempo del Estado para hablar a los ciudadanos, etcétera, etcétera, etcétera.
Hubo quien quiso salir de ese debate y se enfocó a ver si hubo o no avances con relación a lo que aconteció en años anteriores. Incluso buscaron cifras de organismos no gubernamentales y hasta gubernamentales de distintas instancias para tratar de insinuar que lo que se estaba presentando no eran más que mentiras.
Claro que no podría faltar algún espacio en el que se comentó el cotilleo entre invitados, que si el senador fulano comió con el diputado perengano o si los miembros de una bancada se reunieron en un determinado restaurante para ponerse de acuerdo en su posicionamiento… en fin.
Después de todo lo que se dijo en los medios, que las apariciones en televisión, que si llegaron todos los invitados, que si debió acudir al Congreso, que si no debió hacerlo y un sinnúmero de etcéteras que rodearon a los informes; fuera del círculo político y los que en él se mueven, ambos informes pudieron pasar de noche y lo mismo ocurría.
Y es que para los habitantes de cualquier entidad y por supuesto de la nación, no hay mejor informe que el que se vive todos los días, si el sueldo alcanza para algo más que para sobrevivir, si se puede salir a la calle sin temor de ser asaltado o de que se regrese a una casa “limpiada” por el hampa.
A la gran mayoría de los mexicanos y mexiquenses poco o menos que muy poco les importó lo que ocurría con los formatos, con los enjuagues, con las comparecencias, con las recriminaciones y hasta con los mensajes; para ellos es más importante llegar a sus lugares de destino en menos tiempo y con mayor seguridad, es más relevante que los gastos escolares no suban, es fundamental que el salario aún alcance para que todos los miembros de la familia puedan bien comer.
Para la gran mayoría de quienes no forman e incluso no les interesa formar parte del círculo político, los informes fueron hasta menos relevantes que el encuentro de futbol de la selección contra Jamaica, y no es para menos.
Los miembros de la sociedad mexicana se interesan cada vez menos en los asuntos políticos ¿por qué? Tal vez porque así lo han procurado quienes juegan ese juego, con reformas que alejan a los ciudadanos de expresar su opinión, con innumerables casos que se platican de boca en boca sobre abusos de poder, de impunidad; con beneficios para los cuales muchos sólo alcanzan a soñar; con infinidad de prácticas no escritas que se llevan a cabo todos los días, con eso y mucho más el interés por lo que los políticos hagan es cada vez menor.
La sociedad ya conoce eso, no se asombra de ocurra, por el contrario, está vacunada y así lo demuestra, se dedica a hacer su vida esperando que sus políticos cumplan con su parte.
Para la mayoría de la gente no hay mejor informe que el que viven todos los días, sin réplicas, sin acusaciones, sin protagonismos de ninguna de las partes; simple y llana eficiencia en el servicio que beneficie su diario actuar. Ahí está la verdadera evaluación con la que los políticos podrán contender a un puesto más alto, ahí se encuentra la diferencia entre ser recordado como un mandatario como nunca ha habido otro, o como uno que, por nofavor, ya no haya otro.

israel.martinez@milenio.com

lunes, 1 de septiembre de 2008

El día después de la marcha / Columna

De medios y otros demonios

El día después de la marcha

J. Israel Martínez Macedo

Este sábado miles de personas caminaron por las calles de distintas partes del país exigiendo a las autoridades más seguridad; resultados en la lucha contra la delincuencia; esclarecimiento de homicidios, robos y secuestros; y sobre todo, un lugar tranquilo en donde poder vivir.
En Toluca, como en seguramente cualquier parte de la República donde se llevó a cabo una manifestación de este tipo, los sentimientos brotaron y desbordaron a los manifestantes que dejaron ver en sus rostros, rabia, coraje, desesperación, pero también esperanza y ganas de confiar en que las autoridades pueden todavía revertir la actual situación.
Pero sólo un día después, una vez vivida la catarsis; todo vuelve a una lamentable, triste e igualmente dolorosa normalidad. Es el resultado de esperar que la autoridad solucione los problemas, como si por haber votado ellos tuvieran que hacerlo todo.
No se trata de salir en defensa de las autoridades. La corrupción como muestra máxima, pero los abusos del poder y los cochupos entre políticos (para muestra véase el excesivo gasto para campañas que aprobaron los partidos a través de sus diputados, eso sí es un insulto) también forman parte de esa falta de sensibilidad que genera hastío por todo lo que tenga un ligero tufo a “cosa pública”.
Pero también es cierto que mucho de lo que ocurre también es responsabilidad de la ciudadanía. Me explico: ¿cuántas de las personas que marcharon el sábado habrán comprado piratería en Los Portales después de haber dejado su vela frente a Palacio de Gobierno o en la Plaza de los Mártires? ¿Cuántos de ellos habrán pagado a un franelero para “cuidar” el coche mientras marchaban?
¿Cuántos han dado una mordida o pagado un coyote para agilizar algún trámite? ¿Cuántos se pasaron uno, do o tres semáforos en rojo para llegar a tiempo a la marcha? ¿Denuncian los delitos de los que llegan a ser testigos o prefieren hacer como que no vieron nada para evitar que los llamen a testificar?
Es muy sencillo caminar por las calles vestidos de blanco con pancartas y consignas pidiendo que “alguien” haga “algo”, pero qué tal ser ese alguien que denuncia, que no compra piratería, que no fomenta la delincuencia, que no se colude con las autoridades, que no paga coyotajes, que respeta la ley por absurda que parezca… no, eso no, eso implica ser ciudadano de verdad, y qué flojera.
Por eso en este día después de la marcha todo volvió a ser como era, porque para que haya un cambio social, aunque suene redundante, se requiere que la sociedad se involucre, que actúe y que no sólo grite, sino que asuma en sus acciones el ¡Ya Basta!

PARÉNTESIS
En el sur del país, en Oaxaca, dos radios comunitarias fueron desmanteladas por quienes dijeron ser policías federales, puede ser un problema dado que desde ayer arrancó el “Encuentro de Radios Comunitarias y Libres” en Zaachila. Sin orden, ni notificación, simplemente los presuntos PFP cargaron con el equipo y bajo la advertencia de llevarse también a la gente si se oponía, el equipo simplemente desapareció. Lamentable.
En tanto, es prácticamente un hecho que, otra vez, la Ley Federal de Radio y Televisión quedará intocada por los diputados y senadores que bajo el escudo de “no enrarecer el ambiente electoral que se avecina” decidieron no abordar el tema en el periodo ordinario de sesiones, a cambio habrá ley que reglamente el derecho de réplica, el cual seguramente estará listo para que puedan replicar sus candidatos en la elección. Qué pena.

israel.martinez@milenio.com

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"Silencio Forzado" Documental de Article 19 sobre la situación del periodismo en México

Documental El Tunel (Completo)

PRESUNTO CULPABLE (completa)