De medios y otros demonios
2012 sin creatividad
J. Israel Martínez Macedo
Está bien que una cosa es la propaganda y otra la publicidad y que no es lo mismo la mercadotecnia política que la comercial pero que tristeza da ver los comerciales de los partidos, los aspirantes a las candidaturas y las instituciones electorales (IFE, IEEM, TRIFE y TRIEEM) en radio y televisión. Falta de creatividad, originalidad, discurso y contenido propositivo, son la constante en todos ellos.
Uno puede ver en los anuncios publicitarios comerciales el uso de técnicas audiovisuales y hasta discursivas como parte de las estrategias de mercadotecnia para generar en los televidentes y radioescuchas la necesidad de consumir uno u otro producto o, al menos, para llamar la atención de estos a lo que el anunciante les ofrece.
Pero las instituciones que estarán participando de una u otra forma en la contienda electoral de este año, parece, optaron por hacer ellos mismos sus anuncios, agarraron una cámara casera y salieron a hacer cualquier cosa sólo para no desaprovechar los minutos que el IFE haya tenido a bien concederles por obra y gracia de la reforma electoral.
Estamos de acuerdo en que una cosa es que dicho ajuste legal, que impide que nadie más que el IFE determine quién sí y quién no puede salir a hacer promoción política en los medios, y otra muy diferente que los publicistas y coordinadores de campañas no tengan la más remota de qué quieren decir a la ciudadanía o sus militancias.
Por ejemplo: en los comerciales del PRI destaca esos terribles y nefastos signos de interrogación, no dejan más que claro que con ellos no sabemos (ni podremos saber) qué esperar. Además, dan por descontado que necesiten el voto, ya se sienten ganadores porque “El PRI lo demostrará gobernando”.
En el PAN no hay una sola idea de qué ofrezca el partido y es que su tiempo se ha ido en mostrar las campañas de sus aspirantes a la candidatura. La de Josefina Vázquez Mota que de plano cometió el error de nombrarla “candidata”. La de Cordero que busca jalar agua de donde sea y la de Creel que de plano sólo dice que ya lo dejaron colgado una vez y que, nomás por eso, ahora voten por él.
En el PRD y las izquierdas las cosas no son muy diferentes. Es un hecho —y se nota en pantalla— que María Rojo es una gran actriz, que domina el escenario y que logra motivar al espectador, pero un discurso vacío, hueco, sin contenido no es más que un desperdicio de actriz, en este momento, para una contienda que lucirá reñida. Cuando realmente tenga algo qué decir, su imagen estará tan vista que a nadie le interesará.
Y qué decir de las instituciones electorales. El IFE tiene tantos mensajes que no queda claro qué pretende decir. Por un lado los informativos para contar con la credencial el día de la elección, por el otro los que lo autoelogian y más bien parecen buscar justificar el dispendio para el proceso, mientras los tribunales sólo atinan a decir que están listos —faltaba más— para garantizar la legalidad del proceso, en el peor de los casos reciclando anuncios de hace años.
Si el camino es ese, lo único garantizado para 2012 es el desinterés de la gente que definitivamente no encuentra un mensaje que le llame la atención y le haga decidir su voto.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
israel.martinez@milenio.com
lunes, 30 de enero de 2012
miércoles, 25 de enero de 2012
¿Y la contingencia, apá? / Columna
De medios y otros demonios
¿Y la contingencia, apá?
J. Israel Martínez Macedo
El secretario de Salud del Estado de México, Gabriel O’Shea Cuevas informó que en la entidad ya van 155 casos de influenza tipo AH1N1 y cinco muertes por esta causa pero se limita a pedir a la población que no se alarme y que refuerce las medidas de prevención.
¿No alarmarse? ¿Por qué hacerlo? Del 17 de marzo de 2009 —que se registró el caso cero en Veracruz— a la primera semana de mayo de 2009 —cuando se activo la contingencia nacional por “gripe porcina”—, hubo cinco muertes en la entidad. Hace 13 días, justo el 12 de enero, el mismo secretario de Salud mexiquense informó sobre dos casos mortales del virus que ya subieron a cinco, los mismos que tardaron dos meses en registrarse durante 2009.
Aparentemente, la cifra de contagios se disparó dramáticamente en el estado. Mientras hace unos cuantos días (el 21 de enero) sólo se reconocían siete, la declaración de O’Shea Cuevas en Valle de Bravo (ayer 24) informa sobre 155, un aumento brutal para sólo tres días.
Ahora, ¿cuántos son 155? ¿Muchos? ¿Pocos? El secretario de Salud federal, Salomón Chertorivski informó que hasta el 23 de enero la dependencia a su cargo tenía registro de 573 casos; si las cifras de Gabriel O’Shea son correctas, el Estado de México tiene poco más o menos 27 por ciento del total de contagios del país.
Como siempre en estos casos, se debe considerar que la entidad es la más poblada de todo el territorio nacional y por eso la cifra podría parecer normal pero no en esta ocasión. Según Chertorivski sólo se han reportado contagios en Hidalgo, Querétaro, Estado de México, Sinaloa, Nuevo León, Morelos y Michoacán; siete de las 32 entidades que conforman el país.
¿Aún siguen pareciendo pocos 155 casos? Durante los 12 meses de 2011, la Secretaría de Salud federal tiene un registro de 250 en total; en los primeros 24 días de 2012 (ni siquiera un mes completo) la cifra se ha superado al doble y a nivel estatal ya alcanza 62 por ciento de lo que pasó en el país el año pasado.
Y entonces ¿para qué hacer menos la situación? Los motivos pueden ser muchos pero aquí hay dos posibilidades: Una amiga acudió a los centros de salud de la entidad para solicitar que la vacunaran, la respuesta fue simple: no hay vacunas. Ocultar la escasez de medicamentos que deberían estar en los botiquines de los hospitales estatales suena a un buen motivo para minimizar.
El segundo es más simple pero más ruin aún: Es año electoral, no conviene un escándalo por una “gripa” que lo más que puede hacer es quitarle la vida a los votantes… quise decir, habitantes —pensé como político—. De acuerdo, no hay que alarmarse pero que tal si empezamos a tomar este asunto un poco más en serio, digo, para variar ¿no?
Twitter: @Mega_J_Israel_M
israel.martínez@milenio.com
¿Y la contingencia, apá?
J. Israel Martínez Macedo
El secretario de Salud del Estado de México, Gabriel O’Shea Cuevas informó que en la entidad ya van 155 casos de influenza tipo AH1N1 y cinco muertes por esta causa pero se limita a pedir a la población que no se alarme y que refuerce las medidas de prevención.
¿No alarmarse? ¿Por qué hacerlo? Del 17 de marzo de 2009 —que se registró el caso cero en Veracruz— a la primera semana de mayo de 2009 —cuando se activo la contingencia nacional por “gripe porcina”—, hubo cinco muertes en la entidad. Hace 13 días, justo el 12 de enero, el mismo secretario de Salud mexiquense informó sobre dos casos mortales del virus que ya subieron a cinco, los mismos que tardaron dos meses en registrarse durante 2009.
Aparentemente, la cifra de contagios se disparó dramáticamente en el estado. Mientras hace unos cuantos días (el 21 de enero) sólo se reconocían siete, la declaración de O’Shea Cuevas en Valle de Bravo (ayer 24) informa sobre 155, un aumento brutal para sólo tres días.
Ahora, ¿cuántos son 155? ¿Muchos? ¿Pocos? El secretario de Salud federal, Salomón Chertorivski informó que hasta el 23 de enero la dependencia a su cargo tenía registro de 573 casos; si las cifras de Gabriel O’Shea son correctas, el Estado de México tiene poco más o menos 27 por ciento del total de contagios del país.
Como siempre en estos casos, se debe considerar que la entidad es la más poblada de todo el territorio nacional y por eso la cifra podría parecer normal pero no en esta ocasión. Según Chertorivski sólo se han reportado contagios en Hidalgo, Querétaro, Estado de México, Sinaloa, Nuevo León, Morelos y Michoacán; siete de las 32 entidades que conforman el país.
¿Aún siguen pareciendo pocos 155 casos? Durante los 12 meses de 2011, la Secretaría de Salud federal tiene un registro de 250 en total; en los primeros 24 días de 2012 (ni siquiera un mes completo) la cifra se ha superado al doble y a nivel estatal ya alcanza 62 por ciento de lo que pasó en el país el año pasado.
Y entonces ¿para qué hacer menos la situación? Los motivos pueden ser muchos pero aquí hay dos posibilidades: Una amiga acudió a los centros de salud de la entidad para solicitar que la vacunaran, la respuesta fue simple: no hay vacunas. Ocultar la escasez de medicamentos que deberían estar en los botiquines de los hospitales estatales suena a un buen motivo para minimizar.
El segundo es más simple pero más ruin aún: Es año electoral, no conviene un escándalo por una “gripa” que lo más que puede hacer es quitarle la vida a los votantes… quise decir, habitantes —pensé como político—. De acuerdo, no hay que alarmarse pero que tal si empezamos a tomar este asunto un poco más en serio, digo, para variar ¿no?
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israel.martínez@milenio.com
lunes, 23 de enero de 2012
Los albores de una nueva era / Columna
De medios y otros demonios
Los albores de una nueva era
J. Israel Martínez Macedo
Las redes sociales son un fenómeno por demás interesante en su desarrollo e interacción; en los últimos días, han dado muestra de la capacidad con que cuentan para movilizar a la sociedad por distintos temas obligando a personajes públicos y políticos a cambiar sus actitudes.
Este tipo de comunicación está generando un proceso que va creciendo a ritmos acelerados y que, de la mano con su utilización en dispositivos móviles como teléfonos celulares o tablets facilitan la interacción social.
Entre los ejemplos más recientes tenemos el caso de Karen Plata que a través de su cuenta en Twitter @KarenzzCobain logró hacer que las autoridades de todos los niveles (incluida la Presidencia de la República) se interesaran en el rescate del cuerpo de su hermano quien había caído al agua en la presa Madín, en Naucalpan.
Otro caso muy conocido fue el del payaso “Platanito Show” quien en uno de sus espectáculos privados fue grabado haciendo un chiste de mal gusto sobre los niños de la Guardería ABC de Sonora y que le costó que los usuarios de las redes sociales exigieran algún tipo de castigo. A final de cuentas, Sergio Verduzco Rubiera, quien encarna el personaje, anunció la decisión de cancelar presentaciones ya hacer algunos arreglos.
Las redes sociales comienzan a manifestarse como el punto de opinión de los ciudadanos sobre temas que tienen que ver con el funcionamiento y la vida de la sociedad, igual aplauden (aunque raramente) alguna acción que consideran apropiada, como condenan otra que simplemente no pasa el rasero del gusto popular.
Como en ocasiones anteriores el impacto de las redes no es independiente al eco que reciben de los medios tradicionales pero comienzan a adquirir mayor fuerza en el interés de los actores políticos e instituciones públicas para la atención de problemas concretos y reales a través del contacto por estos medios virtuales.
Las redes como herramientas pueden ser ese eje de cambio que movilice a las instituciones en beneficio de la sociedad y que, al mismo tiempo, se convierta en el lugar común para que la sociedad pueda observarse a sí misma y un promotor para que la gente se interese en los temas políticos.
Las herramientas valen por el uso que puede dárseles y también existe el riesgo de que utilicen de manera incorrecta como esquemas para manipular, desinformar y malinformar sobre algún tema o personaje público como parte de las múltiples estrategias que se diseñan para obtener el poder.
Afortunadamente estas redes sociales han aprendido a generar, a través de sí mismas, mecanismos de defensa no sólo contra estas acciones sino contra las amenazas de censura de las que han sido objeto como ocurrió con las iniciativas SOPA y PIPA en Estados Unidos, SINDE en España, la llamada Ley Döring en México e incluso el ACTA.
Estamos en el origen de estos mecanismos y en este momento caminan como esa palestra en la que la discusión se presenta y logra llegar hasta los más altos niveles del gobierno, de seguir así, la democracia podría estar viviendo una incipiente nueva etapa pero hay que esperar para ver cómo se desarrolla.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
israel.martinez@milenio.com
Los albores de una nueva era
J. Israel Martínez Macedo
Las redes sociales son un fenómeno por demás interesante en su desarrollo e interacción; en los últimos días, han dado muestra de la capacidad con que cuentan para movilizar a la sociedad por distintos temas obligando a personajes públicos y políticos a cambiar sus actitudes.
Este tipo de comunicación está generando un proceso que va creciendo a ritmos acelerados y que, de la mano con su utilización en dispositivos móviles como teléfonos celulares o tablets facilitan la interacción social.
Entre los ejemplos más recientes tenemos el caso de Karen Plata que a través de su cuenta en Twitter @KarenzzCobain logró hacer que las autoridades de todos los niveles (incluida la Presidencia de la República) se interesaran en el rescate del cuerpo de su hermano quien había caído al agua en la presa Madín, en Naucalpan.
Otro caso muy conocido fue el del payaso “Platanito Show” quien en uno de sus espectáculos privados fue grabado haciendo un chiste de mal gusto sobre los niños de la Guardería ABC de Sonora y que le costó que los usuarios de las redes sociales exigieran algún tipo de castigo. A final de cuentas, Sergio Verduzco Rubiera, quien encarna el personaje, anunció la decisión de cancelar presentaciones ya hacer algunos arreglos.
Las redes sociales comienzan a manifestarse como el punto de opinión de los ciudadanos sobre temas que tienen que ver con el funcionamiento y la vida de la sociedad, igual aplauden (aunque raramente) alguna acción que consideran apropiada, como condenan otra que simplemente no pasa el rasero del gusto popular.
Como en ocasiones anteriores el impacto de las redes no es independiente al eco que reciben de los medios tradicionales pero comienzan a adquirir mayor fuerza en el interés de los actores políticos e instituciones públicas para la atención de problemas concretos y reales a través del contacto por estos medios virtuales.
Las redes como herramientas pueden ser ese eje de cambio que movilice a las instituciones en beneficio de la sociedad y que, al mismo tiempo, se convierta en el lugar común para que la sociedad pueda observarse a sí misma y un promotor para que la gente se interese en los temas políticos.
Las herramientas valen por el uso que puede dárseles y también existe el riesgo de que utilicen de manera incorrecta como esquemas para manipular, desinformar y malinformar sobre algún tema o personaje público como parte de las múltiples estrategias que se diseñan para obtener el poder.
Afortunadamente estas redes sociales han aprendido a generar, a través de sí mismas, mecanismos de defensa no sólo contra estas acciones sino contra las amenazas de censura de las que han sido objeto como ocurrió con las iniciativas SOPA y PIPA en Estados Unidos, SINDE en España, la llamada Ley Döring en México e incluso el ACTA.
Estamos en el origen de estos mecanismos y en este momento caminan como esa palestra en la que la discusión se presenta y logra llegar hasta los más altos niveles del gobierno, de seguir así, la democracia podría estar viviendo una incipiente nueva etapa pero hay que esperar para ver cómo se desarrolla.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
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sábado, 21 de enero de 2012
La guerra de los bits / Columna
De medios y otros demonios
La guerra de los bits
J. Israel Martínez Macedo
Cuando se hablaba de la posibilidad de que ocurriera una batalla de magnitudes mundiales se sospechaba del petróleo o, con todos los problemas climáticos, del agua pero nunca de algo como la libertad de expresión y los derechos de autor, dos temas que se unen gracias a los recientes acontecimientos en materia de internet y manejo de la información.
Para los que aún no estén enterados: el FBI cerró uno de los principales sitios para compartir archivos libremente: Megaupload y comenzó con la detención de sus fundadores y principales administradores acusándolos de piratería, con lo que desató una reacción en cadena de proporciones inimaginables.
De inicio el grupo Anonymous informó que, el jueves en la noche, habían deshabilitado los sitios: justice.gov, universalmusic.com, riaa.org, mpaa.org, copyright.gov, hadopi.fr, wmg.com, usdoj.gov, bmi.com y por supuesto fbi.gov; las páginas gubernamentales fueron reestablecidas el viernes por la mañana.
Además existe el temor (fundado o no) de que el siguiente objetivo del FBI sean páginas como Facebook, Twitter o YouTube dado que en ellas los usuarios también comparten videos, música o archivos que podrían estar bajo la protección de los derechos de autor.
La libertad de expresión y el derecho de autor protegen, básicamente, lo mismo: las ideas. En el caso de la libertad de expresión se procura el derecho a comunicar lo que cada quien piensa mientras que el derecho de autor resguarda la posibilidad de usufructuar esa idea e impedir que otro se apropie de ella obteniendo un beneficio para sí.
En este caso, Anonymous acusa un intento del gobierno de estados unidos parta evitar que se comparta de manera libre la información que circula por Megaupload mientras que el FBI indica que debe proteger el derecho de autor cuya propiedad está en manos de grandes corporativos del entretenimiento.
En qué terminará este enfrentamiento, es difícil saberlo. La complejidad de batallas con estas características radica en que no se trata de quién tiene el mejor armamento sino de quién conoce y maneja mejor el lenguaje de programación para hacer daño o defenderse del rival.
El caso va más allá de lo que aquí someramente se ha descrito pero una cosa es cierta: después de lo que ha ocurrido y las propuestas de leyes SOPA, PIPA, Sinde, Döring, entre otras que buscan regular contenidos bajo el argumento de derechos de autor y que amenazan a abrir el cajón de la censura, el internet ya no será el mismo, la guerra de los bits ya comenzó.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
israel.martinez@milenio.com
La guerra de los bits
J. Israel Martínez Macedo
Cuando se hablaba de la posibilidad de que ocurriera una batalla de magnitudes mundiales se sospechaba del petróleo o, con todos los problemas climáticos, del agua pero nunca de algo como la libertad de expresión y los derechos de autor, dos temas que se unen gracias a los recientes acontecimientos en materia de internet y manejo de la información.
Para los que aún no estén enterados: el FBI cerró uno de los principales sitios para compartir archivos libremente: Megaupload y comenzó con la detención de sus fundadores y principales administradores acusándolos de piratería, con lo que desató una reacción en cadena de proporciones inimaginables.
De inicio el grupo Anonymous informó que, el jueves en la noche, habían deshabilitado los sitios: justice.gov, universalmusic.com, riaa.org, mpaa.org, copyright.gov, hadopi.fr, wmg.com, usdoj.gov, bmi.com y por supuesto fbi.gov; las páginas gubernamentales fueron reestablecidas el viernes por la mañana.
Además existe el temor (fundado o no) de que el siguiente objetivo del FBI sean páginas como Facebook, Twitter o YouTube dado que en ellas los usuarios también comparten videos, música o archivos que podrían estar bajo la protección de los derechos de autor.
La libertad de expresión y el derecho de autor protegen, básicamente, lo mismo: las ideas. En el caso de la libertad de expresión se procura el derecho a comunicar lo que cada quien piensa mientras que el derecho de autor resguarda la posibilidad de usufructuar esa idea e impedir que otro se apropie de ella obteniendo un beneficio para sí.
En este caso, Anonymous acusa un intento del gobierno de estados unidos parta evitar que se comparta de manera libre la información que circula por Megaupload mientras que el FBI indica que debe proteger el derecho de autor cuya propiedad está en manos de grandes corporativos del entretenimiento.
En qué terminará este enfrentamiento, es difícil saberlo. La complejidad de batallas con estas características radica en que no se trata de quién tiene el mejor armamento sino de quién conoce y maneja mejor el lenguaje de programación para hacer daño o defenderse del rival.
El caso va más allá de lo que aquí someramente se ha descrito pero una cosa es cierta: después de lo que ha ocurrido y las propuestas de leyes SOPA, PIPA, Sinde, Döring, entre otras que buscan regular contenidos bajo el argumento de derechos de autor y que amenazan a abrir el cajón de la censura, el internet ya no será el mismo, la guerra de los bits ya comenzó.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
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lunes, 16 de enero de 2012
Hacia una "imagocracia" / Columna
De medios y otros demonios
Hacia una “imagocracia”
J. Israel Martínez Macedo
Ahora que estamos de lleno en la cuestión electoral y en vista de que, al menos, uno de los aspirantes a la candidatura presidencial de su partido se ha construido principalmente con base en la imagen mediática, se corre el riesgo de caer en una “imagocracia” en la que, como siempre, el ciudadano sólo es un medio para el poder y no el objeto mismo del poder.
Tal parece que la tendencia que privilegia la imagen por sobre todas las cosas, en materia política, se verá reflejada también en materia de administración pública, lo cual sería un lamentable retroceso pues los gobiernos terminarían por ceder su papel en la resolución de problemas y buen manejo de los recursos con tal de obtener una imagen agradable a la ciudadanía.
El ejemplo claro lo vemos en el gobierno del Estado de México. Para verse más que su antecesor, ofrecieron cumplir con seis mil compromisos de campaña y en los primeros 100 días, según dijo el propio gobernador, se cumplieron 803 de estos.
En el papel, en los comerciales, en los eslóganes, en la imagen, puede parecer como un gobierno muy trabajador, muy eficiente y hasta comprometido con la buena administración pública; sin embargo, al detalle puede observarse que todo es sólo un juego de números y palabras.
Al revisar cada uno de los compromisos cumplidos se puede observar que en muchos casos corresponden a acciones de novel municipal realizadas en localidades priistas que se atribuyen a labor estatal, además de que al inicio de la administración se entregaron obras que evidentemente fueron iniciadas en el periodo de Enrique Peña Nieto y en las que el actual gobierno ni siquiera tuvo ingerencia.
Lo mismo ocurre en el caso federal, tan enfocado en demostrar que la lucha contra la delincuencia organizada no es baladí, y que se ha logrado dar atención médica a todos los mexicanos a través de un seguro popular que de todos modos, termina cobrando la atención médica.
La publicidad de las acciones “del gobierno del Presidente de la República” como se anuncian en los comerciales, no da cuenta de los indígenas que se suicidan en la sierra Tarahumara por no poder dar a su familia qué comer o porque no hay las mínimas condiciones para sobrevivir.
En lo municipal vemos cómo la administración de Toluca, por ejemplo, se enfoca en una plaza que no sirvió para reubicar a vendedores ambulantes mientras existen aún, en la capital mexiquense, calles sin pavimentar o con baches o hasta comunidades sin servicios.
Lo lamentable, lo preocupante es que las decisiones de gobierno se tomen y lleven a cabo por cuestión de imagen y no por atender a las necesidades más básicas y fundamentales a las que todo buen gobierno debería enfocarse.
Gobernar sólo por tener una buena imagen pública puede tener consecuencias terribles para la gente, el que las decisiones se tomen desde la óptica del uso político y no de las necesidades sociales tendrá consecuencias terribles, la imagocracia puede evitarse, aún es tiempo.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
israel.martinez@milenio.com
Hacia una “imagocracia”
J. Israel Martínez Macedo
Ahora que estamos de lleno en la cuestión electoral y en vista de que, al menos, uno de los aspirantes a la candidatura presidencial de su partido se ha construido principalmente con base en la imagen mediática, se corre el riesgo de caer en una “imagocracia” en la que, como siempre, el ciudadano sólo es un medio para el poder y no el objeto mismo del poder.
Tal parece que la tendencia que privilegia la imagen por sobre todas las cosas, en materia política, se verá reflejada también en materia de administración pública, lo cual sería un lamentable retroceso pues los gobiernos terminarían por ceder su papel en la resolución de problemas y buen manejo de los recursos con tal de obtener una imagen agradable a la ciudadanía.
El ejemplo claro lo vemos en el gobierno del Estado de México. Para verse más que su antecesor, ofrecieron cumplir con seis mil compromisos de campaña y en los primeros 100 días, según dijo el propio gobernador, se cumplieron 803 de estos.
En el papel, en los comerciales, en los eslóganes, en la imagen, puede parecer como un gobierno muy trabajador, muy eficiente y hasta comprometido con la buena administración pública; sin embargo, al detalle puede observarse que todo es sólo un juego de números y palabras.
Al revisar cada uno de los compromisos cumplidos se puede observar que en muchos casos corresponden a acciones de novel municipal realizadas en localidades priistas que se atribuyen a labor estatal, además de que al inicio de la administración se entregaron obras que evidentemente fueron iniciadas en el periodo de Enrique Peña Nieto y en las que el actual gobierno ni siquiera tuvo ingerencia.
Lo mismo ocurre en el caso federal, tan enfocado en demostrar que la lucha contra la delincuencia organizada no es baladí, y que se ha logrado dar atención médica a todos los mexicanos a través de un seguro popular que de todos modos, termina cobrando la atención médica.
La publicidad de las acciones “del gobierno del Presidente de la República” como se anuncian en los comerciales, no da cuenta de los indígenas que se suicidan en la sierra Tarahumara por no poder dar a su familia qué comer o porque no hay las mínimas condiciones para sobrevivir.
En lo municipal vemos cómo la administración de Toluca, por ejemplo, se enfoca en una plaza que no sirvió para reubicar a vendedores ambulantes mientras existen aún, en la capital mexiquense, calles sin pavimentar o con baches o hasta comunidades sin servicios.
Lo lamentable, lo preocupante es que las decisiones de gobierno se tomen y lleven a cabo por cuestión de imagen y no por atender a las necesidades más básicas y fundamentales a las que todo buen gobierno debería enfocarse.
Gobernar sólo por tener una buena imagen pública puede tener consecuencias terribles para la gente, el que las decisiones se tomen desde la óptica del uso político y no de las necesidades sociales tendrá consecuencias terribles, la imagocracia puede evitarse, aún es tiempo.
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sábado, 14 de enero de 2012
PRI, Peña y Televisa / Columna
De medios y otros demonios
PRI, Peña y Televisa
J. Israel Martínez Macedo
Ya no es desconocido para nadie en este país que detrás de la candidatura de Enrique Peña Nieto está Televisa, ya sea por interés personal o contratos convenidos pero ahí está, tratando de cuidar la imagen del “precandidato para efectos legales” (como le explicó Pedro Joaquín Codwell); sin embargo: ¿debería haber preocupación en el PRI por esto?
Hasta el momento los priistas se han mostrado muy a gusto con que la empresa de medios impulse a su abanderado para la contienda electoral del primero de julio sin considerar qué pasará el día en que los intereses de la empresa choquen con los intereses del partido ¿a cuáles atenderá Peña Nieto?
El problema no es menor ni tendrá que esperar a que el mexiquense logre la Presidencia de la República, no tendrá que esperar a ver la postura respecto a la actualización (urgente por cierto) a la Ley Federal de Radio y Televisión o la de Telecomunicaciones, la bomba estallará antes y, posiblemente, muy cerca del día de la elección.
En los cuarteles tricolores no es desconocido que la imagen del “precandidato para efectos legales” está en manos de la gente de Televisa y que la gente de Peña Nieto cumple funciones menos, digamos relevantes.
Ello lo comentan para tratar de justificar los lamentables errores en los que se ha visto envuelto el de Atlacomulco ante los medios, las entrevistas y las filtraciones que le afectan directa o indirectamente con miras a la contienda.
Los priistas miran con recelo a la gente de Televisa porque “no saben nada de política” y tienen razón; los de la empresa de medios (fieles a su costumbre) desdeñan a los tricolores porque “son políticos, qué van a saber de esto” y el desgaste puede culminar con un conflicto justo a media campaña.
Los priistas se disciplinan y siguen las indicaciones del candidato (como lo dictan los cánones de las formas en el partido) a Televisa el candidato le da igual, como él tienen otras tantas opciones en otros partidos con los que negocian sin el menor de los pudores.
Reza el adagio que: “el que a dos amos sirve, con uno queda mal” y si la sabiduría popular no engaña Peña Nieto quedará mal con alguno de sus dos amos, la duda es ¿con quién ira a quedar mal el priista, con la empresa que le construyó la imagen y lo ha hecho lo que es o con el partido al que siempre ha servido y al que fue educado a servir?
La respuesta sólo la sabe el “precandidato para efectos legales” pero entre sus correligionarios hay la percepción de que sin duda el mexiquense prefiere quedarle mal al PRI que a Televisa, el tiempo electoral lo definirá porque en algún momento los intereses chocarán y con él los equipos.
Lo que no se veía entre priistas a principios de diciembre es la duda que surge de ver cómo Peña pierde en imagen (que quizás no en encuestas) pero AMLO gana en preferencias. El tricolor parece ya no poder crecer mucho en las campañas mientras que el perredista sí lo podrá hacer, y eso más el factor Televisa causa un poco de nerviosismo, por llamarlo de algún modo.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
israel.martinez@milenio.com
PRI, Peña y Televisa
J. Israel Martínez Macedo
Ya no es desconocido para nadie en este país que detrás de la candidatura de Enrique Peña Nieto está Televisa, ya sea por interés personal o contratos convenidos pero ahí está, tratando de cuidar la imagen del “precandidato para efectos legales” (como le explicó Pedro Joaquín Codwell); sin embargo: ¿debería haber preocupación en el PRI por esto?
Hasta el momento los priistas se han mostrado muy a gusto con que la empresa de medios impulse a su abanderado para la contienda electoral del primero de julio sin considerar qué pasará el día en que los intereses de la empresa choquen con los intereses del partido ¿a cuáles atenderá Peña Nieto?
El problema no es menor ni tendrá que esperar a que el mexiquense logre la Presidencia de la República, no tendrá que esperar a ver la postura respecto a la actualización (urgente por cierto) a la Ley Federal de Radio y Televisión o la de Telecomunicaciones, la bomba estallará antes y, posiblemente, muy cerca del día de la elección.
En los cuarteles tricolores no es desconocido que la imagen del “precandidato para efectos legales” está en manos de la gente de Televisa y que la gente de Peña Nieto cumple funciones menos, digamos relevantes.
Ello lo comentan para tratar de justificar los lamentables errores en los que se ha visto envuelto el de Atlacomulco ante los medios, las entrevistas y las filtraciones que le afectan directa o indirectamente con miras a la contienda.
Los priistas miran con recelo a la gente de Televisa porque “no saben nada de política” y tienen razón; los de la empresa de medios (fieles a su costumbre) desdeñan a los tricolores porque “son políticos, qué van a saber de esto” y el desgaste puede culminar con un conflicto justo a media campaña.
Los priistas se disciplinan y siguen las indicaciones del candidato (como lo dictan los cánones de las formas en el partido) a Televisa el candidato le da igual, como él tienen otras tantas opciones en otros partidos con los que negocian sin el menor de los pudores.
Reza el adagio que: “el que a dos amos sirve, con uno queda mal” y si la sabiduría popular no engaña Peña Nieto quedará mal con alguno de sus dos amos, la duda es ¿con quién ira a quedar mal el priista, con la empresa que le construyó la imagen y lo ha hecho lo que es o con el partido al que siempre ha servido y al que fue educado a servir?
La respuesta sólo la sabe el “precandidato para efectos legales” pero entre sus correligionarios hay la percepción de que sin duda el mexiquense prefiere quedarle mal al PRI que a Televisa, el tiempo electoral lo definirá porque en algún momento los intereses chocarán y con él los equipos.
Lo que no se veía entre priistas a principios de diciembre es la duda que surge de ver cómo Peña pierde en imagen (que quizás no en encuestas) pero AMLO gana en preferencias. El tricolor parece ya no poder crecer mucho en las campañas mientras que el perredista sí lo podrá hacer, y eso más el factor Televisa causa un poco de nerviosismo, por llamarlo de algún modo.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
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lunes, 9 de enero de 2012
¿Habrá llegado ese día? / Columna
De medios y otros demonios
¿Habrá llegado ese día?
J. Israel Martínez Macedo
Hace algunos años cuando las redes sociales comenzaron a llamar la atención de los usuarios mexicanos se llegó a pensar que esta nueva forma de comunicación permitiría un acercamiento entre ciudadanos y autoridades para que los segundos brindaran mejor atención a los primeros, pero eso no ocurrió.
Pese a que las condiciones tecnológicas, efectivamente, estaban dadas el pronóstico no se dio porque hacían falta algunos elementos, principalmente en cuanto a la responsabilidad de los usuarios que aún no descubrían el potencial.
Aunado a ello se necesitaba que las autoridades, en su momento, comprendieran el valor del uso de las redes sociales para mantener el vínculo con los ciudadanos y tuvieran la voluntad de acercarse a ellos de alguna u otra forma.
Pese al crecimiento que las redes sociales tuvieron en el transcurso de este tiempo, las instituciones se habían quedado al margen, en parte por desconocimiento del potencial pero también por un desinterés y falta de credibilidad en que éstas pudieran ser herramientas fiables.
Por eso destaca lo que ocurrió el primer día de este año en la Presa Madín, pese a que ocurrió en el contexto de una tragedia, es un hecho que da una luz de esperanza en el uso de las redes sociales y la posibilidad de ejercer el derecho a exigir que las instituciones públicas hagan su trabajo.
La madrugada del 1 de enero una lancha volcó en la Presa Madín ocasionando la muerte de Javier Plata Durán, un joven de 27 años que tras haber presentado malestares médicos cayó del bote en el que viajaba para ya no poder regresar a él.
Esa mañana la familia comenzó la búsqueda del cuerpo sin tener resultados por lo que la hermana de la víctima, Karen Plata, utilizó Twitter para pedir ayuda. Tres fueron los mensajes que salieron de la cuenta @KarenzzCobain y lo detonaron todo.
“Si alguien conoce un buzo particular ayudenme por favor! @CdSatelite echenme la mano, mi hermano se cayo a la presa... Ayudenme”. Le siguió: “@djchezzko0 tu ayudame a mi, echame la mano no seas mala onda, consigueme a un buzo por favor” y el tercero y más dramático: “@djchezzko0 AYUDAME!!!!!”.
A partir de ahí la gente se volcó en retuitear, las autoridades que habían hecho oídos sordos a la solicitud de ayuda de manera tradicional no pudieron hacerlo más cuando los usuarios de las redes sociales se involucraron. Por la tarde 28 buzos de 12 instituciones ya estaban en la búsqueda del cuerpo; 107 personas en total para la búsqueda de Javier Plata.
La situación generó el interés de Margarita Zavala quien incluso llamó a Karen para ofrecerle su apoyo y asegurarle que encontrarían el cuerpo de su hermano, el gobernador Eruviel Ávila hizo lo propio en Twitter afirmando que los recursos del estado estaban volcados en este operativo.
¿Habrá llegado el día en que los ciudadanos, a través de las redes sociales, logren que las autoridades por fin pongan atención en sus necesidades? Es cierto que una flor no hace la primavera pero si ya pasó una vez puede ocurrir de nuevo, ya se mostró el camino, vale la pena seguirlo.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
israel.martinez@milenio.com
¿Habrá llegado ese día?
J. Israel Martínez Macedo
Hace algunos años cuando las redes sociales comenzaron a llamar la atención de los usuarios mexicanos se llegó a pensar que esta nueva forma de comunicación permitiría un acercamiento entre ciudadanos y autoridades para que los segundos brindaran mejor atención a los primeros, pero eso no ocurrió.
Pese a que las condiciones tecnológicas, efectivamente, estaban dadas el pronóstico no se dio porque hacían falta algunos elementos, principalmente en cuanto a la responsabilidad de los usuarios que aún no descubrían el potencial.
Aunado a ello se necesitaba que las autoridades, en su momento, comprendieran el valor del uso de las redes sociales para mantener el vínculo con los ciudadanos y tuvieran la voluntad de acercarse a ellos de alguna u otra forma.
Pese al crecimiento que las redes sociales tuvieron en el transcurso de este tiempo, las instituciones se habían quedado al margen, en parte por desconocimiento del potencial pero también por un desinterés y falta de credibilidad en que éstas pudieran ser herramientas fiables.
Por eso destaca lo que ocurrió el primer día de este año en la Presa Madín, pese a que ocurrió en el contexto de una tragedia, es un hecho que da una luz de esperanza en el uso de las redes sociales y la posibilidad de ejercer el derecho a exigir que las instituciones públicas hagan su trabajo.
La madrugada del 1 de enero una lancha volcó en la Presa Madín ocasionando la muerte de Javier Plata Durán, un joven de 27 años que tras haber presentado malestares médicos cayó del bote en el que viajaba para ya no poder regresar a él.
Esa mañana la familia comenzó la búsqueda del cuerpo sin tener resultados por lo que la hermana de la víctima, Karen Plata, utilizó Twitter para pedir ayuda. Tres fueron los mensajes que salieron de la cuenta @KarenzzCobain y lo detonaron todo.
“Si alguien conoce un buzo particular ayudenme por favor! @CdSatelite echenme la mano, mi hermano se cayo a la presa... Ayudenme”. Le siguió: “@djchezzko0 tu ayudame a mi, echame la mano no seas mala onda, consigueme a un buzo por favor” y el tercero y más dramático: “@djchezzko0 AYUDAME!!!!!”.
A partir de ahí la gente se volcó en retuitear, las autoridades que habían hecho oídos sordos a la solicitud de ayuda de manera tradicional no pudieron hacerlo más cuando los usuarios de las redes sociales se involucraron. Por la tarde 28 buzos de 12 instituciones ya estaban en la búsqueda del cuerpo; 107 personas en total para la búsqueda de Javier Plata.
La situación generó el interés de Margarita Zavala quien incluso llamó a Karen para ofrecerle su apoyo y asegurarle que encontrarían el cuerpo de su hermano, el gobernador Eruviel Ávila hizo lo propio en Twitter afirmando que los recursos del estado estaban volcados en este operativo.
¿Habrá llegado el día en que los ciudadanos, a través de las redes sociales, logren que las autoridades por fin pongan atención en sus necesidades? Es cierto que una flor no hace la primavera pero si ya pasó una vez puede ocurrir de nuevo, ya se mostró el camino, vale la pena seguirlo.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
israel.martinez@milenio.com
sábado, 7 de enero de 2012
La esencia de Tv Mexiquense / Columna
De medios y otros demonios
La esencia de Tv Mexiquense
J. Israel Martínez Macedo
La última semana de 2011 y la primera de 2012 estuvieron marcadas, en materia de medios, por el reclamo de Porfirio Muñoz Ledo tras la cancelación de su programa “Bitácora mexicana” de Televisión Mexiquense situación que se hizo pública a través de un artículo en la revista Proceso.
Vía Twitter y Facebook, circuló el artículo, una introducción del trabajo que se publicó en la edición de esta semana de la revista; cinco párrafos que prometían un nuevo escándalo de comunicación en la entidad: nada más lejos.
El problema inicial es la confusión que se generó por el mal uso de un concepto en el artículo. Al inicio señala “en el sistema de medios públicos del Estado de México, que recibirá una ampliación presupuestal para el nuevo año, ya no hay lugar para la barra de opinión y análisis”.
De entrada, el Sistema de Radio y Televisión Mexiquense no es un medio público sino estatal y esto no es una arbitrariedad o consideración personal, Raúl Trejo Delarbre, en las discusiones y deliberaciones realizadas en distintos foros sobre medios de comunicación señala que se pueden identificar tres aspectos para considerar un medio “público”:
1) Financiamiento total o parcialmente cubierto con recursos fiscales. 2) Autonomía funcional respecto de los gobiernos en turno. 3) Formas o espacios de consulta y/o retroalimentación con la sociedad. Si bien el Sistema de Radio y Televisión Mexiquense cumple con dos de los tres requisitos, no lo hace en cuanto a la “autonomía funcional respecto a los gobiernos en turno”.
Esto hace de Mexiquense una televisora estatal, sujeta a los designios y condiciones que la administración gubernamental en turno desee implementar, desde la estrategia administrativa hasta las políticas editoriales en las que se basa la determinación de crear, continuar o dar fin a una producción.
Así, si la administración gubernamental del Estado de México decide crear, mantener o poner fin a una emisión; el sistema de radio y televisión debe obedecer esa indicación.
Esto significa que no se rompe con ningún esquema establecido ni representa alguna infracción o ilegalidad, como bien puede leerse en el texto completo que se publica en la revista y que difiere en sentido respecto al que se difundió en internet.
Los que sí se puede leer es que el único que se quejó por perder su espacio es Porfirio Muñoz Ledo, quien desdeña el trabajo cuando no es el suyo en una declaración que no se destacó en internet: “Ahora quieren hacer una televisión ranchera, provinciana, con infoentretenimiento como en la televisión comercial, y otros que se llaman programas identitarios para promover las tradiciones mexiquenses. Aspiran a entretener sentimientos locales y elementales”.
Quizás los del Estado de México, los nuevos conductores que habrán de cubrir los espacios que dejarán los programas que salen del aire, no estén a la altura del ameno comunicador Muñoz Ledo, pero eso no le da derecho a descalificar producciones, mucho menos sin conocerlas y sólo porque se realicen fuera del DF. El centralismo mediático ochentero en toda su expresión.
El punto del problema no es si se termina o no el ciclo de una producción, sino ¿cuáles son las políticas culturales y de comunicación en las que el gobierno del Estado de México basa sus decisiones editoriales? ¿Alguien las conoce? ¿Existen? Porque de ello deriva qué es lo que el gobierno mexiquense quiere comunicar. A final de cuentas esa es la esencia de Radio y Televisión Mexiquense.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
israel.martinez@milenio.com
La esencia de Tv Mexiquense
J. Israel Martínez Macedo
La última semana de 2011 y la primera de 2012 estuvieron marcadas, en materia de medios, por el reclamo de Porfirio Muñoz Ledo tras la cancelación de su programa “Bitácora mexicana” de Televisión Mexiquense situación que se hizo pública a través de un artículo en la revista Proceso.
Vía Twitter y Facebook, circuló el artículo, una introducción del trabajo que se publicó en la edición de esta semana de la revista; cinco párrafos que prometían un nuevo escándalo de comunicación en la entidad: nada más lejos.
El problema inicial es la confusión que se generó por el mal uso de un concepto en el artículo. Al inicio señala “en el sistema de medios públicos del Estado de México, que recibirá una ampliación presupuestal para el nuevo año, ya no hay lugar para la barra de opinión y análisis”.
De entrada, el Sistema de Radio y Televisión Mexiquense no es un medio público sino estatal y esto no es una arbitrariedad o consideración personal, Raúl Trejo Delarbre, en las discusiones y deliberaciones realizadas en distintos foros sobre medios de comunicación señala que se pueden identificar tres aspectos para considerar un medio “público”:
1) Financiamiento total o parcialmente cubierto con recursos fiscales. 2) Autonomía funcional respecto de los gobiernos en turno. 3) Formas o espacios de consulta y/o retroalimentación con la sociedad. Si bien el Sistema de Radio y Televisión Mexiquense cumple con dos de los tres requisitos, no lo hace en cuanto a la “autonomía funcional respecto a los gobiernos en turno”.
Esto hace de Mexiquense una televisora estatal, sujeta a los designios y condiciones que la administración gubernamental en turno desee implementar, desde la estrategia administrativa hasta las políticas editoriales en las que se basa la determinación de crear, continuar o dar fin a una producción.
Así, si la administración gubernamental del Estado de México decide crear, mantener o poner fin a una emisión; el sistema de radio y televisión debe obedecer esa indicación.
Esto significa que no se rompe con ningún esquema establecido ni representa alguna infracción o ilegalidad, como bien puede leerse en el texto completo que se publica en la revista y que difiere en sentido respecto al que se difundió en internet.
Los que sí se puede leer es que el único que se quejó por perder su espacio es Porfirio Muñoz Ledo, quien desdeña el trabajo cuando no es el suyo en una declaración que no se destacó en internet: “Ahora quieren hacer una televisión ranchera, provinciana, con infoentretenimiento como en la televisión comercial, y otros que se llaman programas identitarios para promover las tradiciones mexiquenses. Aspiran a entretener sentimientos locales y elementales”.
Quizás los del Estado de México, los nuevos conductores que habrán de cubrir los espacios que dejarán los programas que salen del aire, no estén a la altura del ameno comunicador Muñoz Ledo, pero eso no le da derecho a descalificar producciones, mucho menos sin conocerlas y sólo porque se realicen fuera del DF. El centralismo mediático ochentero en toda su expresión.
El punto del problema no es si se termina o no el ciclo de una producción, sino ¿cuáles son las políticas culturales y de comunicación en las que el gobierno del Estado de México basa sus decisiones editoriales? ¿Alguien las conoce? ¿Existen? Porque de ello deriva qué es lo que el gobierno mexiquense quiere comunicar. A final de cuentas esa es la esencia de Radio y Televisión Mexiquense.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
israel.martinez@milenio.com
lunes, 2 de enero de 2012
Lo que se viene para 2012 / Columna
De medios y otros demonios
Lo que se viene para 2012
J. Israel Martínez Macedo
El de 2012 es un año que genera muchas expectativas en los distintos rubros de la comunicación, en México y a nivel mundial. El proceso electoral venidero promete nuevas estrategias en el manejo de medios, el periodismo (al menos en México) continuará como una de las profesiones más peligrosas.
La tendencia de 2011 en materia de periodismo en México continúa con lo que se ha visto en 2010 y 2009: agresiones, ataques y muerte. La situación no es exclusiva, es resultado de la incapacidad de todos los niveles de gobierno para brindar garantías a la población sumado a un sistema judicial deficiente.
En el Estado de México se trabaja en una legislación en la materia pero las propuestas vigentes y en discusión en la Cámara de Diputados carecen de elementos para garantizar mejores condiciones para la disciplina y sólo buscan dar gusto a los reporteros y sus asociaciones
Las elecciones son un factor que siempre genera interés en materia de comunicación. Los publicistas deben crear estrategias que les permitan mantener o remontar (según sea el caso) las ventajas que inicialmente tienen sus candidatos.
En territorio mexiquense siempre es interesante ver cómo las estrategias buscan anclar a los contendientes locales para diputados y alcaldes a las imágenes y propuestas de la presidencial, no obstante se presentan ideas que abonan o destruyen y en eso deberán tener cuidado los partidos.
En materia de producción audiovisual en México estamos en el hoyo. No se ve por dónde surja una propuesta para hacer televisión de calidad, que no trate a los televidentes como tontos o ignorantes. La solución puede ser la tercer propuesta de señal abierta nacional que venga a poner presión sobre Televisa y Tv Azteca pero se vislumbra complicado dado el antecedente con la televisora del Ajusco.
En el Estado de México las televisoras continúan siendo canales alternos de sus filiales nacionales, mientras que los realmente locales no son una propuesta de interés para la población, incluso Mexiquense se enfrentará a las acusaciones de Porfirio Muñoz Ledo de censura por sacarlo del aire previo al año electoral.
En radio la tendencia de cierre de 2011 abre un interesante panorama para 2012 porque la gente parece buscar compañía e información a través en este medio. Los esquemas de “más música y menos voz” se ven rebasados derivado de la interacción que las redes sociales permiten. Sabiéndola explotar, ésta puede generarle un impulso importante.
En lo estatal, Mexiquense le apuesta a producciones enfocadas en un público joven o por lo menos así lo reflejan sus programas que no sólo son formato sino fondo. En la radio comercial Los 40 Principales seguirá siendo lo que en el DF quieran, que a su vez son lo que Grupo Prisa dicta desde España, Ultra cierra el año con una propuesta por demás interesante pero con un proceso evolutivo que habla de un trabajo que podría consolidarse en 2012; Radiorama tuvo un desarrollo importante en la entidad pero aún no muy perceptible, mientras que Acir parece apostar por la continuidad.
Sin duda las nuevas tecnologías seguirán siendo tendencia, sobre todo en materia de manejo de redes sociales pero ello también representa un gran reto para los medios porque se encuentran en proceso de descifrar este nuevo esquema informativo. Sin grandes anuncios espectaculares, este año que arranca promete para aquellos medios que le apuesten a la creatividad, la tecnología está aquí, el reto para este año es encontrar la mejor manera de usarla.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
israel.martinez@milenio.com
Lo que se viene para 2012
J. Israel Martínez Macedo
El de 2012 es un año que genera muchas expectativas en los distintos rubros de la comunicación, en México y a nivel mundial. El proceso electoral venidero promete nuevas estrategias en el manejo de medios, el periodismo (al menos en México) continuará como una de las profesiones más peligrosas.
La tendencia de 2011 en materia de periodismo en México continúa con lo que se ha visto en 2010 y 2009: agresiones, ataques y muerte. La situación no es exclusiva, es resultado de la incapacidad de todos los niveles de gobierno para brindar garantías a la población sumado a un sistema judicial deficiente.
En el Estado de México se trabaja en una legislación en la materia pero las propuestas vigentes y en discusión en la Cámara de Diputados carecen de elementos para garantizar mejores condiciones para la disciplina y sólo buscan dar gusto a los reporteros y sus asociaciones
Las elecciones son un factor que siempre genera interés en materia de comunicación. Los publicistas deben crear estrategias que les permitan mantener o remontar (según sea el caso) las ventajas que inicialmente tienen sus candidatos.
En territorio mexiquense siempre es interesante ver cómo las estrategias buscan anclar a los contendientes locales para diputados y alcaldes a las imágenes y propuestas de la presidencial, no obstante se presentan ideas que abonan o destruyen y en eso deberán tener cuidado los partidos.
En materia de producción audiovisual en México estamos en el hoyo. No se ve por dónde surja una propuesta para hacer televisión de calidad, que no trate a los televidentes como tontos o ignorantes. La solución puede ser la tercer propuesta de señal abierta nacional que venga a poner presión sobre Televisa y Tv Azteca pero se vislumbra complicado dado el antecedente con la televisora del Ajusco.
En el Estado de México las televisoras continúan siendo canales alternos de sus filiales nacionales, mientras que los realmente locales no son una propuesta de interés para la población, incluso Mexiquense se enfrentará a las acusaciones de Porfirio Muñoz Ledo de censura por sacarlo del aire previo al año electoral.
En radio la tendencia de cierre de 2011 abre un interesante panorama para 2012 porque la gente parece buscar compañía e información a través en este medio. Los esquemas de “más música y menos voz” se ven rebasados derivado de la interacción que las redes sociales permiten. Sabiéndola explotar, ésta puede generarle un impulso importante.
En lo estatal, Mexiquense le apuesta a producciones enfocadas en un público joven o por lo menos así lo reflejan sus programas que no sólo son formato sino fondo. En la radio comercial Los 40 Principales seguirá siendo lo que en el DF quieran, que a su vez son lo que Grupo Prisa dicta desde España, Ultra cierra el año con una propuesta por demás interesante pero con un proceso evolutivo que habla de un trabajo que podría consolidarse en 2012; Radiorama tuvo un desarrollo importante en la entidad pero aún no muy perceptible, mientras que Acir parece apostar por la continuidad.
Sin duda las nuevas tecnologías seguirán siendo tendencia, sobre todo en materia de manejo de redes sociales pero ello también representa un gran reto para los medios porque se encuentran en proceso de descifrar este nuevo esquema informativo. Sin grandes anuncios espectaculares, este año que arranca promete para aquellos medios que le apuesten a la creatividad, la tecnología está aquí, el reto para este año es encontrar la mejor manera de usarla.
Twitter: @Mega_J_Israel_M
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