"Escribir sale del alma, los otros medios son aparatos, son máquinas"

"Escribir sale del alma, los otros medios son aparatos, son máquinas"

Gabriel García Márquez

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lunes, 30 de julio de 2012

Un peligro para... / Columna

De medios y otros demonios

Un peligro para…

J. Israel Martínez Macedo

Los próximos días serán definitorios para el perredismo (y en general para todos los partidos autodenominados de izquierda) en el país. Las decisiones de Andrés Manuel López Obrador respecto a la llamada defensa de la democracia en México para justificar la lucha por anular y cambiar a su favor el resultado de la elección, podrían traerles consecuencias severas.
El asunto de las manifestaciones genera gasto de recursos a los partidos y sus militantes. Los fans de AMLO no tienen inconveniente alguno en asistir pero la inmensa mayoría lo hace sólo cuando son acarreados por algún líder del partido o de lo que fuera (¿es?) Morena.
El riesgo que corren en este sentido es que se pueda observar el alcance y fuerza reales del movimiento lopezobradorista en el país. Es un hecho que el bastión perredista es el Distrito Federal pero fuera de él, sólo en una cuantas localidades han tenido eco los llamados de movilización del de Macuspana.
Este mismo fin de semana quedó claro que el músculo pierde poder. El llamado a tomar las plazas de distintas localidades no tuvo ningún impacto en varias de ellas y el que se hizo para tomar las capitales el próximo domingo puede ser determinante.
La estrategia es errónea pero ya está en marcha. Para la movilización del próximo domingo 5 de agosto, en el centro de la República, los militantes deberán elegir si acuden a la capital de su estado o al Zócalo capitalino y esta situación los pone en una encrucijada real.
Si los militantes no se ven en sus entidades se mostrarán ante las fuerzas políticas locales como débiles; si no acuden al DF se les puede acusar de abandonar al movimiento pero, además, no conseguirán el impacto de una gran reunión masiva que puedan observar los medios nacionales a quienes, después de todo, se debe convencer de que hay algún interés de la gente.
A eso se suma la (des) organización del movimiento #YoSoy132, agrupación que sigue bajo la presunción de ser universitaria y que de serlo, en agosto, se enfrentará a un factor fundamental para su sobrevivencia: el inicio de clases.
No es lo mismo preparar y realizar marchas con todo el tiempo libre para hacerlo que tener que ir a clases, cumplir con un horario escolar (muchas veces una complejidad en sí mismo) y además dedicar tiempo a la defensa de lo-que-sea-que-estemos-defendiendo.
Los partidos y líderes de izquierda deben (algunos ya lo hacen) de ser muy cuidadosos. López Obrador no tiene nada qué perder pues él ya perdió en la elección y cualquier cosa, cualquiera, para él ya es ganancia; pero los partidos sí tienen qué perder y mucho (un error, una ilegalidad y hasta el registro se va).
Pies de plomo para no volar de más y evitar que el mismo sol (¿azteca?) les derrita las alas, de lo contrario la caída puede ser estrepitosa y hasta fatal.

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martes, 24 de julio de 2012

Reconocer despenalizando / Columna

De medios y otros demonios

Reconocer despenalizando

J. Israel Martínez Macedo

La Legislatura local aprobó el día de ayer la despenalización de los delitos de difamación y calumnias; la medida suele ser tomada en cuenta como un avance en materia de libertad de expresión y aplaudida rápidamente por las diferentes asociaciones periodísticas como una forma tratar de generar la imagen de que están interesadas en este tema.
No obstante esta simulación, la realidad es que la medida sigue siendo una concesión para tratar de agradar al sector periodístico sin que exista detrás de ello una precisa reflexión sobre lo que socialmente significa la aprobación de esta reforma.
En primer lugar, el argumento base para eliminar este tipo de delitos es que son acusaciones que se utilizan para acallar voces críticas por parte de políticos corruptos que sólo buscan venganza contra los opinadores críticos que denuncian sus operaciones “por debajo de la mesa”.
Despenalizar los delitos bajo ese argumento no es otra cosa más que el reconocimiento tácito del Ejecutivo (quien fue el que presentó la iniciativa el lunes 23 de abril pasado) y del Legislativo que efectivamente esa conducta es una práctica que ocurre en el Estado de México, dicho de otro modo, reconocen que los políticos y funcionarios corruptos usan la ley para vengarse de los periodistas.
La despenalización de la difamación y la calumnia como medida de protección a los periodistas es aceptar que los políticos y servidores públicos del Estado de México son un peligro, no sólo para los periodistas sino también para la libertad de expresión.
Quizás lo sean, las mediciones en materia de agresiones a periodistas y medios indican que los que más incurren en esta práctica son los políticos y funcionarios, sobre todo los de nivel municipal y estatal; no es la delincuencia organizada ni la delincuencia común, son los hombres y mujeres que nos gobiernan y en cuyas manos dejamos el deber de nuestra protección.
En concreto, el mensaje que envían el Ejecutivo y los diputados es que en el Estado de México es necesario proteger a los reporteros y periodistas de los políticos y servidores públicos que tratan de cobrar venganza por exponer sus cochupos y negocios bajo el cobijo de su cargo.
Ahora los reporteros no serán encarcelados por el ejercicio de su función sino que las represalias tendrán que ser asunto de un juicio civil (por la vía legal) y quién sabe qué cosas (por la vía ilegal).
Seguramente llegará el aplauso fácil y el agradecimiento pueril a la medida, pero en realidad no abona en nada al ejercicio de la profesión, lo que tenía que decirse era dicho, ello exigía un mayor nivel profesional para comprobar los dichos; habrá que ver cómo afecta la medida al gremio pero eso sólo el tiempo lo develará.

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lunes, 23 de julio de 2012

El espejo de los medios / Columna

De medios y otros demonios

El espejo de los medios

J. Israel Martínez Macedo

El escándalo Monex, olimpiadas, denuncias electorales, berrinches postelectorales, delincuencia organizada, el extraño caso Ferriz de Con más lo que se acumule en la semana son sólo algunos de los temas de la agenda nacional que parecen mantener nuestra atención enfocada en ellos.
Y digo que parecen mantener nuestra atención porque fuera de determinados círculos muchos de estos no tienen mayor relevancia, interés o hasta conocimiento, ¿dudas?
Basta con ponerse a platicar con la gente en cualquier lugar: un taxi, un puesto de revistas, una taquería, dónde sea y preguntar la opinión sobre el caso Monex y la respuesta inmediata es “no sé, ¿qué es eso?” y cuando uno apenas empieza a explicar que tiene que ver con el presunto (aún no está comprobado legalmente y eso obliga, periodísticamente hablando, a usar la expresión) fraude en la elección presidencial un comentario interrumpe el discurso: “Ay jóven, si siempre es lo mismo y todos son iguales”.
Es interesante descubrir cómo en un momento en el que se supone que el país está tan politizado, como resultado de un proceso electoral que apenas tendrá poco más de 20 días, la gente, la población, la masa ha perdido de nueva cuenta el interés sobre lo que ocurra en el ámbito político-social-económico.
Para muchas, sorprendentemente muchas personas serán más importantes los resultados de la primera jornada del futbol mexicano y, a partir del viernes, los de la delegación olímpica mexicana en Londres.
Es la realidad mexicana en que nos estamos sumiendo nuevamente. No tiene tanto qué ver con la ideología o el desinterés aprendido culturalmente como sí muy probablemente con un sentimiento de lejanía, con la ausencia de un vínculo posible entre lo que “los políticos” hacen y lo que “el pueblo” vive.
Es resultado de la lucha de grupos por el poder y sólo por el poder, porque de esos e trata todo en el ámbito político. Los distintos partido peleándose por quién va a ser el que administre el recurso público para ver si se gasta en los negocios de un grupo empresarial u otro y si se toma revancha con los antagónicos de toda la vida o no.
En todo este enjambre ¿dónde quedaron los medios y su capacidad de meter en la consciencia, subconsciencia e insconsciencia de la gente cualquier asunto que quieran? ¿A dónde fue esa omnipotencia manipuladora capaz de hacer que la gente hable de lo que ellos quieren que se hable y de lo que no?
Mucho de lo que vemos en los medios es, nos guste reconocerlo o no, reflejo de la sociedad en que vivimos. Cada uno de ellos, cada opción, representa el interés y forma de pensar de un grupo en particular; en conjunto, una proyección social de lo que somos. ¿Qué, Alicia, no te gusta lo que ves en el espejo? Es duro saber que “el Rey Rojo fue parte de mi sueño..., pero también es cierto que yo formé parte del suyo”.

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domingo, 22 de julio de 2012

Revolucionarios de marca / Columna

De medios y otros demonios

Revolucionarios de marca

J. Israel Martínez Macedo

¿Alguien ha notado algo raro en las imágenes de manifestaciones que se suben a las redes sociales? Esas en las que los manifestantes levantan sus mantas llenas de insultos y descalificaciones para denunciar una, eso sí, viciado, ruin y corrupto proceso electoral (y no lo digo sólo por un partido, todos por igual hicieron trampa, uno más que otros pero todos lo hicieron).
Volviendo al punto, ¿alguien notó alguna semejanza entre esas imágenes y alguna otra que sea, no sé, de una salida de escuela o la fiesta de los primos que nunca se ven en casa de la tía Juliana? Efectivamente: son poses.
No me refiero a las que se tratan de un montaje, a las que les cambian el texto del cartel o le ponen más o menos participantes con Photoshop; hablo de las reales, por supuesto que los manifestantes están ahí, indignados, exigiendo justicia y democracia (aunque muchos no apliquen la primera o entiendan la segunda) pero ahí están, son posadamente reales.
Me explico: si tiene acceso a alguna red social, la que sea, entre a ella; abra una imagen que algún manifestante haya subido a internet para que sus amigos lo vean qué tan rebelde o revolucionario puede llegar a ser. Sí, posando: mostrando el cartel que hizo con pinturas vinci o con una frase original y creativa.
Ya sé que el sólo hecho de ir en una manifestación no implica que la gente tenga que ir con cara de perro malcomido, pero también es cierto que ello habla no sólo de la seriedad con la que están tomando el movimiento sino también de la importancia que le dan.
Es curioso ver cómo hay imágenes de los revolucionarios del siglo XXI enfundados en sus jeans de marca, con sus Converse originales y de temporada, sus sudaderas Abercrombie o playeras DKNY, cubriendose el rostro con unos grandes lentes oscuros quizás Arman Exchange y jugueteando en las marchas tomándose fotos con caras chistosas.
Eso sólo recuerda la novela de George Orwel “1984”, los dos minutos de odio que el sistema le permitía y programaba a la gente para desfogar sus traumas y rencores para, después de ello, dar paso a la insana cotidianidad conformista de siempre.
Cuando Andrés Manuel López Obrador anuncia su plan en defensa de la democracia y dice que se tomen las plazas para hacer eventos culturales y verbenas populares ¿acaso no es exactamente lo mismo?
Fue motivador ver que las juventudes salían a las calles contra un sistema corrupto. Era de esperarse que el sistema accionara sus mecanismos de defensa para integrarlos. Fue triste ver cómo el grupo que se vende a sí mismo como solución terminó por ayudar al sistema a absorber la demanda… Pero lo doloroso fue ver que los jóvenes cayeran tan fácil en esa trampa. ¿Ilusiones, espejismos, fantasmas? Eso sí: de marca.

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lunes, 16 de julio de 2012

El México que vivimos / Columna

De medios y otros demonios

El México que vivimos

J. Israel Martínez Macedo

Vaya días los anteriores: primero la detención de dudosa legalidad de la periodista Sunjuana Martínez; los ataques a las instalaciones de El Norte, en Monterrey; la firma de México al ACTA; la del convenio de colaboración de los gobernadores para la protección a periodistas y defensores de derechos humanos; y la invención del “periodismo colonizante” de AMLO.
La detención de Sanjuana Martínez tuvo tintes de revanchismo dado que la jueza que gira la orden de aprehensión por un asunto civil, Luz María Guerrero Delgado, es la misma que la reportera había denunciado en trabajos periodísticos y contra quien presentó una denuncia por corrupción ante el Consejo de la Judicatura de Nuevo León. La acción (i)legal confirmó en los hechos la denuncia.
La juez sigue repartiendo justicia al mejor postor y la reportera, según narra en una excelente crónica en su blog, ya se encuentra en libertad luego de pasar una noche en prisión sin que hubiera motivos legales para mantenerla ahí. El México corrupto e impune en que vivimos.
El martes amanecimos con la noticia del ataque con granadas al diario El Norte de Monterrey, comimos con lo que se pensaba una copia de la información pero después se supo que era un segundo ataque. El México violento e impune en que vivimos.
La noche del jueves México firmó el Acuerdo Comercial Contra la Falsificación (ACTA por sus siglas en inglés) una propuesta que limita el uso de la información en internet y pone en riesgo los datos privados en la red, por algo la Cofetel y el IFAI se han pronunciado en contra.
La firma no significa nada más que el reconocimiento tácito de que “donde mandan las empresas no gobierna ‘Presidente del empleo’”. ACTA es un acuerdo que obliga a los Estados a crear leyes para hacerlo valer, pero aún debe ser ratificado por el Senado, la firma del gobierno no vale sin la ratificación. El México de simulaciones impunes en que vivimos.
A este hecho se suma otra firma, la de los gobernadores del país a otro acuerdo, el de protección de periodistas y defensores de derechos humanos, todos muy felices aseguraron que harán lo que se necesite para su cumplimiento, claro que no dicen que los principales agresores son políticos pero qué importa, es el México de cinismo impune que en que vivimos.
La última, una joya: López Obrador explota contra el editorial del diario español El País que, en resumen, advierte que es un limitante para la izquierda. Los acusa de hacer “periodismo colonizante”; por más que busqué no pude encontrar una referencia que definiera lo que AMLO quiso decir, a menos que esté advirtiendo que aquel medio busque conquistar nuestro país. El México absurdo e impune en que vivimos.
Es cierto, existen muchos tipos de México pero en todos coincide una cosa, el origen de todos los males tal vez: la impunidad. Es el México simplemente impune en que seguimos viviendo.

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lunes, 9 de julio de 2012

Hay que sopesar las redes / Columna

De medios y otros demonios

Hay que sopesar las redes

J. Israel Martínez Macedo

El papel de las redes sociales durante el proceso electoral fue, sin lugar a dudas, fundamental para que la participación ciudadana el día de la jornada incrementara sustancialmente; por morbo o legítimo interés en el resultado, la gente salió a votar.
Las redes también fueron mecanismos para denunciar abusos y básicamente cualquier sospecha de operación de algún fraude en tiempo real; a través de las nuevas tecnologías se pudieron conocer las sofisticadas artimañas que todos los partidos realizaron durante el domingo.
Después, cuando el IFE informó sobre los resultados de su conteo rápido, comenzaron las congratulaciones y los insultos; las amenazas llegaron a las redes y las acusaciones de fraude electoral con ellas.
A partir de ahí se utilizó para denunciar cualquier cosa que pudiera parecer delito electoral pero también para insultar y descalificar, situación que empezó por incomodar a los usuarios y terminó por molestar a quienes, cansados y desgastados por el bombardeo de las últimas semanas, ya querían dar por terminado el proceso.
Las redes sirvieron para generar desinformación, las voces (todas por igual) parecían calificadas para decir que había fraude igualmente se limitaron a presentar imágenes de dudosa procedencia, algunas más que otras, editadas, modificadas o creadas en algún programa de edición, algunas otras, muy pocas, fidedignas de lo que había pasado en realidad.
Ese interés desmedido por encontrar pruebas que sustentaran la fe en que hubo fraude hicieron que muchos usuarios replicaran por igual las pruebas falsas y las verdaderas, el resultado fue una total ausencia de credibilidad a lo que en las redes aparecía.
Los últimos días, las redes han servido para expresar puntos de vista y fotografiar a personas quejándose, formando una impresión de que los inconformes son más de lo que parece llegando a excesos que rayan en lo absurdo y muestran el gran sinsentido en el que cayó la elección.
El papel de las redes sociales fue fundamental para generar interés en la elección, el desconocimiento de cómo usarlas ocasionó que no hubiera forma de influenciar a los usuarios en beneficio (o perjuicio) de algún candidato u otro, sólo de causar (eso sí) un interés inusitado en la elección.
A final de cuentas debemos sopesar el valor de las redes sociales en la elección. ¿Influyeron? Sin duda, ¿los usuarios consiguieron su objetivo? No lo creo (la mayoría de estos parecía querer la derrota de Peña Nieto, cosa que no ocurrió) ¿espacio para la organización social? Evidentemente sí. ¿Credibilidad? ...difícil de determinar.
Sin duda el tema merece una mayor investigación porque las redes seguirán siendo factor en los futuros procesos. Son universos aparte que pueden influir en el mundo real, en las urnas; resta por saber ¿cómo y hasta dónde?... y con urgencia.

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lunes, 2 de julio de 2012

Falsificación: Acción vil / Columna

De medios y otros demonios

Falsificación: Acción vil

J. Israel Martínez Macedo

Las elecciones siempre desatan pasiones, generan un ánimo desenfrenado y, en los militantes así como algunos seguidores de los partidos y candidatos, se vuelve un asunto de relevancia por afinidad o interés; se transforma en apasionamiento desenfrenado en el que se pone en riesgo a terceros.
Eso fue lo que ocurrió este domingo con una falsificación de la portada de MILENIO Estado de México que apareció en fotocopias simulando ser la de este domingo 1 de julio en la que se alteró la nota principal para colocar el encabezado “Renuncia Martha Hilda a la candidatura del PRI”.
La falsedad de la publicación es evidente: ninguna portada de MILENIO incluye la firma del reportero en sus cabezas, además de que en este caso la supuesta nota era acreditada de una compañera reportera que no trabaja en esta casa editorial.
La falsificación incluía dos fotografías de la candidata del PRI a la presidencia municipal de Toluca, Martha Hilda González, y se dejó información de la edición que fue alterada correspondiente al sábado 30, lo que amplió la posibilidad de confusión.
Por la mañana la publicación fue desmentida a través de la página del minuto por minuto de MILENIO Estado de México, las redes sociales del periódico así como en otros medios electrónicos que entendieron la importancia de presentar información verídica en un día tan importante como fue este domingo.
También por la mañana, un trabajador de esta casa editorial fue detenido cuando repartía la edición verdadera de este domingo; los oficiales, en cumplimiento de sus funciones, señalaron que estaban circulando estas copias y verificaron que el contenido de la camioneta del periódico era la edición correcta y real del domingo.
Al mediodía se empezó a manejar que la publicación había sido una idea de militantes del Partido Acción Nacional (PAN) a los que se les hizo fácil falsificar una portada una fuente confirmó que “algo sabían de eso (al interior del partido) pero no era con intención de hacer daño”. Instantes después, Juan Carlos Núñez Armas apareció en una radiodifusora para hacer el deslinde oficial.
Lamentable situación que no sólo muestra descontrol de lo que pasa al interior de ese partido. Suponiendo sin conceder que efectivamente se haya tratado de una acción individual y personal de algunos militantes que no representan la postura oficial del PAN, es inconcebible que en algo tan delicado como una elección exista este nivel de falta de control de la militancia. Pésimo.

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"Silencio Forzado" Documental de Article 19 sobre la situación del periodismo en México

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