Campañas mediáticas / Columna

De medios y otros demonios

Campañas mediáticas

J. Israel Martínez Macedo

El proceso electoral está en pleno en el Estado de México y los tiempos en medios electrónicos ya fueron repartidos, lo que genera que ya comiencen a escucharse los anuncios publicitarios de algunos institutos políticos en la radio local.
Sin embargo, todo indica que, nuevamente, no podremos esperar campañas mediáticas de altura, propositivas y hasta innovadoras por parte de los partidos que amenazan con presentarnos, una vez más, cualquier cantidad de descalificaciones más allá de ideas.
Los procesos anteriores, el perfil de las campañas presentadas ha sido, en resumen, una especie de: “¡Hey!, no votes por ellos son más malos que nosotros”, y las propuestas terminan por ser de un perfil bajísimo.
Los políticos y analistas se cansan de decir que es necesario subir el nivel de la política dado el desgaste que hay en la población. El desánimo en la ciudadanía y el nivel de debate presentado hasta ahora, amenaza una escasa participación el 3 de julio.
Por eso es indispensable que los partidos, candidatos y sus asesores de medios analicen la posibilidad de no dar tanto peso a la desacreditación de los rivales y presentar un esquema de propuestas concretas y planes de trabajo que puedan atraer el interés de la población votante.
La gente está más que cansada de que el PRI culpe de todo al gobierno federal, el PAN al gobierno estatal y el PRD a ambos; por lo que las campañas deben ser innovadoras, propositivas y creativas.
Seguramente —es parte del juego político— cada contendiente tendrá su estrategia de desacreditación de los rivales, las famosas “campañas negras”; pero lo ideal es que éstas se manejen de manera alternativa a lo que pueden hacer de frente a la población para evitar un impacto no deseado con relación al desanimo preexistente de la gente.
Es un hecho que lo que se haga en el Estado de México para la contienda del 3 de julio sentará un precedente para el proceso electoral de 2012, claro, tomando en cuenta la estrategia priista de placear al candidato para que vean que no sólo es guapo sino también simpático y se deja pellizcar, como ocurrió en 2005.
La gente ya se cansó de las desacreditaciones y los ataques, eso lo vemos y escuchamos en todos los informativos, todos los días, haya o no campañas electorales. Lo que la población ya espera de sus candidatos es que tengan soluciones para los problemas que nos aquejan. Sí aún servirá el reparto de despensas, pero sólo para llenar los mítines, la gente ya no compromete su voto por una bolsa de arroz y frijoles.
Soluciones, propuestas, ideas, es lo que queremos escuchar. Basta ya de agredirnos con sus ataques personales, no queremos ver eso en los medios, no prendemos la televisión o el radio para verlos y escucharlos insultarse unos a otros. Es hora de hacer las cosas diferentes para que podamos creerles que, en verdad, son una oferta mejor.

@Mega_J_Israel_M
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